Sergio Pérez comenzó su temporada de Fórmula 1 con el pie derecho. El segundo lugar logrado en el Gran Premio de Bahréin lo coloca desde ahora en la lucha por el título mundial de F1, que ha sido la meta expresada por el mexicano. Pero el tapatío es autocritico y analiza el porque no pudo competirle a Max Verstappen por la victoria en Sakhir.
Para Checo, la arrancada fue la clave, ya que Mad Max conservó la punta y Pérez se vio presionado por Charles Leclerc atrás, al punto de que llegó a haber un ligero contacto con el monegasco y también con Carlos Sainz Jr. Y si bien rebasó a Leclerc (quien terminó por abandonar más adelante) y llegó a tener mayor ritmo que su compañero por momentos, ese inicio de carrera llegó a ser determinante para el resultado de la misma.
“La largada me puso fuera de poder pelear con Max, pero lo único que podía hacer era terminar segundo, lo máximo”, expresó Checo mientras era entrevistado por Nico Rosberg al final de la carrera. “(La clave será) tratar de acercarme en cada práctica, en cada sesión”.
Fuera de ese resultado, Pérez aplaude el arranque de año para Red Bull, pues comenzar con un 1-2 es lo que buscaban para empezar a sumar puntos importantes para el campeonato de constructores. Fue una de las metas que se plantearon en la temporada baja y vaya que lo consiguieron.
“Es sueño el comienzo de esta temporada para el equipo, si vemos cómo comenzamos el año pasado, abandonando los dos. Es muy lindo comenzar así, hemos trabajado muy fuerte durante el invierno, ganando la primera carrera y con el 1-2, tenemos el paquete completo”, aseguró el de Guadalajara.
Asimismo, manifestó que el auto RB19 se siente bastante bien, por lo que espera conseguir más resultados de este calibre y, por supuesto, darlo todo para pelear en esta temporada en el llamado Gran Circo.
“Me siento muy cómodo con el auto, tengo un buen paquete y trataré de hacer lo mejor”, culminó Checo, quien tiene 18 puntos en la campaña y también su podio número 27 en la categoría.
FCM