Sergio Pérez remó a contracorriente en el Gran Premio de Italia, en donde se repuso de un inicio complicado y acabó sexto en Monza, tras arrancar desde la posición 13 por las sanciones que tuvo que cumplir al cambiar su motor por cuarta vez en la temporada y lidiar con el riesgo de abandonar la carrera cuando salió humo desde la parte delantera de su auto, en la parte superior derecha de su eje.
El triunfo fue para su compañero Max Verstappen, quien también demostró su superioridad en el RB18 y tomó la punta, la cual alternó por momentos con Charles Leclerc, quien sigue rezagándose en el campeonato mundial ante el neerlandés, cada vez más cerca de refrendar su título.
Sí, Checo rescató importantes puntos en Italia, donde llegó a estar en la última posición y que logró subir hasta la quinta posición, pero tuvo que conformarse con el sexto lugar y el punto de la vuelta rápida, con lo que llega a 210 puntos, todavía en el tercer lugar del campeonato de pilotos, pero con George Russell pisándole los talones, con 203 unidades.
Un inicio difícil
El mexicano no tuvo una gran largada, ya que perdió hasta tres puestos en las primeras vueltas y batalló para recuperar su posición de salida, colocándose por detrás de su ex compañero Esteban Ocon.
Pero fue en la octava vuelta cuando Checo pasó a boxes para cambiar sus neumáticos medios por unos duros, en busca de un stint largo antes de regresar a pits. Después de salir a pista, fue que se presentó el humo, además de algunas llamaradas en el proceso.
“Está saliendo del disco derecho del freno”, informó Sergio Pérez a través del radio. El tapatío reanudó la carrera en la última posición, pero escaló un puesto por el abandono de Sebastian Vettel (Aston Martin), quien se paró en la vuelta 12 cuando su auto no dio para más.
Remontada con riesgo extra
De poco a poco, Checo tomó un gran ritmo de carrera, pero siempre con la presión de si el auto podía continuar o llegaba el doloroso abandono ante los problemas en su llanta delantera. Checo tuvo éxito al tratar de refrigerar la zona y comenzó a escalar en la carrera.
En la vuelta 16, Nicholas Latifi (Williams) también hizo el cambio a gomas duras y eso le permitió subir un puesto a Pérez. Para la vuelta 20 ya corría entro de los 10 primeros, mientras que en la vuelta 37 ya era el quinto mejor piloto, por detrás de Carlos Sainz.
Checo se mantuvo constante y, después de 35 vueltas con el juego de neumáticos duro, Checo apostó por un último stint con el compuesto suave, con lo que pasó a boxes y regresó a pista en la séptima posición, con Lewis Hamilton y Lando Norris al frente.
Polémico final
En el giro 48, el auto de Daniel Ricciardo se detuvo y provocó la salida del safety car. Norris hizo una parada en boxes y Checo subió al sexto lugar. La polémica se encendió porque tres autos rezagados no rebasaron el auto de seguridad, lo cual perjudicó las aspiraciones de Leclerc por tratar de ir por la victoria.
El Gran Premio de Italia finalizó bajo bandera amarilla y nadie más tuvo oportunidad de recuperarse. Checo conservó su sexto lugar, el punto extra por la vuelta rápida y Ferrari no pudo festejar ante su público, con el segundo puesto de Leclerc.
La Fórmula 1 recuerda a la Reina Isabel II antes del Gran Premio de Italia
La Fórmula 1 recordó a la reina Isabel II con un minuto de silencio en su memoria antes del Gran Premio de Italia que se celebra este domingo en el circuito de Monza.
Por segunda vez este fin de semana, la categoría reina del automovilismo homenajeó a Isabel II, en esta ocasión un cuarto de hora antes de la carrera, justo en los instantes previos a que el tenor Andrea Bocelli interpretara el himno de Italia.
La Fórmula 1 ya había recordado a la monarca del Reino Unido, que falleció el pasado jueves, con otro minuto de silencio el viernes antes de que comenzara la actividad en la pista con los primeros entrenamientos libres del fin de semana.
MGC