El Real Madrid cumplió pero no brilló ante el Brujas en un partido de Liga de Campeones sin trascendencia para los blancos, con la clasificación ya asegurada, en el que Zinedine Zidane dio oportunidad a los suplentes y en el que Rodrygo, Vinicius y Modric pusieron los goles (1-3).
El Real Madrid pasa para octavos como segundo de grupo, acceso que tenía garantizado matemáticamente, mientras que el Brujas consolida su tercer puesto que le da el pase a la Europa League gracias a la victoria del París Saint-Germin (PSG), líder, contra el Galatasaray turco por 5-0.
Tras una primera parte sin dueño, en la que el Brujas puso el hambre de victoria que le faltó a los suplentes del Real Madrid, los blancos se adelantaron en la segunda mitad por mediación de Rodrygo, pero encajaron el empate casi de inmediato, se adelantaron de nuevo con un gol de Vinicius que supuso su primera diana en Liga de Campeones y certificaron la victoria con un tanto de Luka Modric.
En una noche fría y húmeda en Brujas, los blancos no entrar de lleno en un partido con una defensa sin automatismos formada por Mendy, Militao, Varane y Odriozola que temblaba cuando los belgas encontraban espacios.
Lo mejor del Madrid en la primera mitad fue un zurdazo seco de Jovic y una bonita intentona en el minuto 34 de Isco Alarcón, que amagó el disparo desde la frontal del área hasta firmar un lanzamiento raso cruzado que se marchó rozando un palo.
Los locales supieron en el descanso que el París Saint-Germain ganaba ya por 2-0 al Galatasaray, lo que virtualmente les colocaba en la Liga Europa y, tras regresar al campo, se encontraron con un gol en contra cuando desde dentro del área Rodrygo empalmó con la izquierda un centro a media altura de Isco y colocó el balón junto al palo derecho de Mignolet.
Pero la alegría del Real Madrid en tierras flamencas duró solo dos minutos y en un trastabillado contraataque del Brujas, en el que el equipo blanco pidió falta sobre Rodrygo, Hans Vanaken culminó la jugada con un disparo con rosca que no alcanzó Areola y subió el 1-1 al electrónico del Jan Breydel.
El Real Madrid, sin cambios aún, levantó al medio millar escaso de aficionados merengues que presenciaban el partido en la grada con un gol de Vinicius, que tuvo olfato para rebañar un balón de Jovic que no supo aprovechar Rodrygo en el borde del área pequeña.