Los jugadores del Inter de Milán, que este miércoles jugarán en el césped artificial del Young Boys la tercera jornada de la Champions League, cambiarán los tacos de sus botas para evitar el riesgo de lesiones al jugar en un terreno poco habitual en el futbol de élite.
Pese a que el Young Boys marcha penúltimo en la máxima categoría de Suiza, encarna un gran peligro para el Inter, especialmente por el césped del Stadion Wankdorf de Berna.
Tanto que el italiano Simone Inzaghi, entrenador 'nerazzurro', según informó este martes la 'Gazzetta dello Sport', ha preparado varias medidas con el fin de evitar que sea un factor determinante.
Sus jugadores cambiarán los tacos de sus botas y jugarán con unos mucho más bajos al no haber tanta profundidad respecto al césped natural. Además, el entrenamiento previo al duelo, en el estadio del partido, será una sesión muy liviana para tomar contacto y evitar cargar los músculos de manera innecesaria por el terreno.
Ya en su día, dos entrenadores como Gian Piero Gasperini, del Atalanta, y José Mourinho, ex del Roma ahora en el Fenerbache, se quejaron de las condiciones del mismo terreno de juego.
El Roma consiguió ganar (1-2) en la fase de grupos de la Europa League 2020, pero Mourinho dijo: "Es inaceptable jugar en un campo así".
Y Gasperini, que empató (3-3) en la fase de grupos de la Champions League en 2021 aseguró que jugar en esa superficie convertía al futbol "en un deporte diferente".
"En toda Europa se juega sobre hierba natural. En el futbol se juega con sol, lluvia y barro. El campo sintético era evitable, pero también nos sobrepondremos de esta situación", añadió.
CIG