Dani Alves cerró su segunda etapa con el Barcelona un poco frustrado al no tener la oportunidad de despedirse de la gente vestido como culé, sobre todo al ser uno de los jugadores que protagonizaron la etapa más prolífica del club a principios de la década pasada; sin embargo, este domingo tendrá la oportunidad de hacerlo enfundado en la playera de Pumas para disputar el tradicional Joan Gamper.
Sí, Dani se sincera y admite que ni en el mejor guion hubiera imaginado que muy pronto volvería a pisar el Camp Nou, con la oportunidad de despedirse del público blaugrana.
“Es extraño regresar con otra camiseta que no sea la del Barcelona, pero el futbol es hermoso porque cuida de la gente que le dedica su tiempo; ni en los mejores guiones hubiera imaginado regresar aquí a Barcelona, porque solo tuve la oportunidad de decir "hola" y no "hasta luego", así que el futbol me está dando la oportunidad de volver a abrazar a la gente que yo quiero”, dijo previo al duelo del próximo domingo.
El jugador brasileño, quien hace dos semanas llegó a México para incorporarse a Universidad, dejó en claro que nunca salió peleado del Barcelona, pero sí le hubiera gustado haberse despedido del público y máxime cuando fue titular en los últimos juegos de la temporada pasada.
“Yo sabía que tenía un contrato de seis meses, lo único que dije es que me hubiera gustado que me hubieran dicho antes para poder decir ciao la gente, porque en el último partido no les pude decir porque no sabía nada; la vida me ha traído de vuelta y voy a poder abrazarlos, decirle adiós a la gente, porque una vez que uno es culé, es culé hasta la muerte”.
La fiesta blaugrana
Dani sabe muy bien lo que representa el Joan Gamper para Barcelona, el trofeo con el que empieza su año futbolístico, por eso desea hacer un buen papel con Pumas; incluso, hasta bromeó de regresar al Camp Nou vestido de blanco.
“Les agradezco mucho la confianza, la oportunidad que me están dando de formar parte de este club, muy especial en México. Poder construir una historia junto con ellos va a ser un gran desafío. La única pereza que me da es que vengo aquí de blanco y eso no me gusta, pero es de los Pumas”, expresó el brasileño.
Y su consejo para sus compañeros es disfrutar este compromiso, aclarando que si anota, no festejará: “Nunca festejaría un gol aquí. A mis compañeros, sinceramente les digo que disfruten de este momento único en sus vidas. Venir aquí, no solo para Pumas, para cualquier otro equipo, es muy muy complicado. Jugarle al Barça aquí es muy difícil y hay que disfrutar de ese lindo día”.
AGB