El delantero uruguayo Edinson Cavani declaró este lunes que se encuentra bien para el partido de vuelta de octavos de final de la Copa Libertadores que su equipo, Boca Juniors, jugará en La Bombonera contra el Nacional de su país.
En una entrevista concedida a El Canal de Boca, el ex futbolista del Nápoles, Paris Saint-Germain, Manchester United y Valencia, entre otros, comentó que "siempre los primeros días" en cualquier club "son los que cuestan" por lo relacionado con el traslado, la búsqueda de casa y la adaptación familiar, pero que, en resumen, se sentía "bien".
Sobre su relación con el técnico, Jorge Almirón, comentó que este le ha demostrado "su apoyo, su cercanía" y consideró que la plantilla está integrada por "un grupo positivo", por lo que, dijo, desea "que todo funcione por esa ilusión que se transmite".
Cavani, que llegó a Boca Juniors tras rescindir el último año de contrato que le quedaba con el Valencia español, afirmó que, con el paso del tiempo, un futbolista "va aprendiendo a descubrir y ver las cosas" que antes, quizá, no se permite por no dar "lugar a esas emociones".
"Me toca vivir una realidad divina y la voy a cuidar para que podamos conseguir cosas", agregó el jugador que fichó por Boca hasta diciembre de 2024.
"El deseo de querer que las cosas salgan bien no es porque a Cavani le vaya bien, sino para que le vaya bien al club, a los compañeros; es un deseo general de todas las cosas", puntualizó.
Pese a que fue presentado oficialmente como jugador auriazul el 31 de julio, no fue convocado por el técnico para el encuentro de ida disputado en Montevideo, que concluyó 0-0, pero ha venido trabajando el resto de la semana con normalidad junto a sus compañeros.
Tras haber disputado cuatro veces la Copa del Mundo y cinco ediciones de la Copa América con la selección uruguaya y de jugar casi 17 años en Europa, este miércoles afrontará por primera vez la Libertadores.
El artillero pudo haberla disputado en 2005, cuando militaba en el Danubio uruguayo y este equipo jugó la fase de grupos. Pero no fue incluido por su técnico, Gerardo Pelusso, en la liga de buena fe para la competición. Y un año después ya estaba en el primer equipo, pero el conjunto no se clasificó para el torneo.
Un año después se mudaría a Italia, donde comenzaría su etapa europea que le llevó también a Francia, Inglaterra y España y a disputar el torneo de clubes más importante del mundo en la actualidad: la Liga de Campeones de la UEFA, además de la Liga Europa.
NV