Para muchos, el éxito del Real Madrid se debe a todo lo que ha hecho Florentino Pérez como presidente del club. Nacido el 8 de marzo de 1947, proviene de una familia de clase media, cuyo padre Eduardo era dueño de dos perfumerías en la capital española.
Y pasó de aquel nivel socioeconómico a convertirse en uno de los hombres más poderosos en el mundo del futbol, dirigente del equipo más influyente y popular en el planeta (al que creció admirando desde niño), además de que tiene una fortuna estimada en 2.1 miles de millones de dólares.
Su historia
Cursó en el colegio Escolapios de San Antón y entró a la Universidad Politécnica de Madrid, en donde estudió la Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos. Fue en la universidad que conoció a Juan de Arespacochaga, quien más adelante se convirtió en alcalde de Madrid y adentró a Florentino en el mundo de la administración pública una vez que tomó el poder.
Fue así que ocupó diferentes cargos políticos entre 1976 y 1983, cuando se movió al sector privado y compró una empresa catalana de construcción, lo que actualmente es Actividades de Construcción y Servicios, S. A. (ASC). Fue a través de Grupo ASC que comenzó su fortuna.
Para el 2000, ya era un millonario influyente y logró la presidencia del Real Madrid, tras un intento fallido en 1995. Fue la promesa de un fichaje estrella la que le valió ser elegido con el 55 por ciento de los votos, con lo que cumplió y se trajo a Luis Figo del Barcelona a los merengues por 60 millones de euros, en lo que comenzó la llamada era de los Galácticos, con las posteriores llegadas de Zinedine Zidane, Ronaldo Nazário y David Beckham.
Incluso logró pagar una deuda de 200 millones de euros que tenía el club, al vender los terrenos del centro de entrenamiento de La Castellana, tras lograr cambiarlas como tierras deportivas a tierras de construcción.
Tras renunciar en 2006, regresó a la presidencia del Real Madrid y logró otros fichajes igual de exitosos, siendo Cristiano Ronaldo el más famoso de ellos. Fue reelecto y su periodo se perfila para acabar en 2025, si es que no se prolonga.
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