Desde hace dos años, México cuenta con una liga de futbol profesional femenil y antes de ella existió una división de futbol femenino amateur, campeonatos regionales y nacionales, de donde salieron la mayoría de las jugadoras que conforman la selección nacional. Pensar en situaciones similares a estas eran imposibles el siglo pasado hasta que un hecho dio pie a que se continuara con la lucha en busca de la práctica del balompié sin importar el género.
El 23 de marzo de 1895 significa una fecha muy importante para el futbol femenil, pues se disputó el primer partido oficial, en Londres, Inglaterra entre el equipo del norte y el equipo del sur, quienes más que la victoria, buscaban desafiar las prohibiciones impuestas por la Asociación de Futbol para que este encuentro se llevara a cabo.
Finalmente, el British Ladies FC, fundado por Nettie Honeyball, venció siete a uno al equipo del sur. La iniciativa planteó el rechazo de una parte de la sociedad que defendían la inadecuación del deporte para el género femenino.
Sin embargo, con la llegada de la Primera Guerra Mundial, las mujeres comenzaron a incorporarse en el mercado laboral y adquirir patrones de comportamiento similares al de los hombres, el futbol fue una de ellas. Como resultado, se dio la fundación del club Dick Kerr’s Ladies F.C. en 1917. Equipo que surgió de la fábrica de municiones Dick, Kerr and Co., en Inglaterra. Su historia es legendaria porque ganaron más de 200 partidos en los cuales la mayoría de sus rivales fueron equipos varoniles.
El éxito de dicho club agudizó las prohibiciones de la Asociación de Futbol Internacional. Sin embargo, eso no impidió la popularización y desarrollo.
Después de más de 70 años de lucha, la institucionalización llegó en 1969 con la fundación de la Asociación Femenil de Futbol y dos años después, finalmente se erradicó la prohibición de su práctica.
En 1971, se celebró el primer partido internacional avalado por la FIFA entre Francia y Holanda, desde entonces el futbol femenil puede presumir de campeonatos, historias y sueños cumplidos.
FCM