Karl-Heinz Rummenigge fue claro: "El Bayern está muy satisfecho con el trabajo de Hans-Dieter Flick. El equipo ha evolucionado bien con él, juega un fútbol atractivo y eso se refleja en los resultados".
Niko Kovac terminó su era con el Bayern Múnich el pasado 3 de noviembre, luego de que el Rekordmeister fuera derrotado 5-1 por el Eintracht Frankfurt, resultado que lo dejaba como cuarto general en la Bundesliga, cuatro puntos por debajo del Borussia Mönchengladbach, líder en Alemania en ese momento.
Si bien en la Champions y en la Copa de Alemania el Bayern daba buenas señales, la situación en la liga comenzaba a ser preocupante, por lo que Uli Hoeneß, en compañía de Rummenigge y de Hasan Salihamidzic, dieron un golpe de timón, removiendo a Kovac del banquillo y colocando a Flick como interino.
Evidentemente, la decisión de separar al croata de la dirección técnica también venía a colación de sus fracasos durante el 2019, tales como la eliminación ante el Liverpool, el Octavos de Final de la Liga de Campeones o la derrota ante el Borussia Dortmund en la Supercopa de Alemania.
Por su parte, en un principio, a Hansi Flick sólo se le pensaba como un bombero para estabilizar al equipo y, en el receso invernal, contratar a alguien más. No obstante, a pesar de su inexperiencia como entrenador en primer plano, los resultados positivos comenzaron rápidamente a aparecer en todos los frentes, haciendo del Bayern –al mismo tiempo- un equipo ofensivo, alegre a la hora de jugar, con mucha profundidad y, además, con un muy buen trato de balón.
Hoy, tras 21 encuentros dirigidos, las creces que ha entregado Hans-Dieter Flick con el Gigante Bávaro son notables y muy satisfactorias, lo que provocó que la directiva del club lo ratificara por dos temporadas y, con ello, echara marcha atrás en su intento de fichar a Mauricio Pochettino o a Massimiliano Allegri, quienes se presentaban como probables candidatos al banquillo.
COMO EN EL 2013
Desde su llegada, a principios de noviembre, Flick ha hecho jugar al Bayern Múnich un poco más cercano al estilo de aquel equipo de Jupp Heynckes que conquistó el triplete en el año 2013, con un tajante juego por los costados y con mediocampistas que pisen constantemente el área, sin olvidar –por supuesto- la pegada ofensiva que representa tener como eje de ataque a Robert Lewandowski. Y, en los resultados, la prueba de ello.
Lo implementado con Flick se ha visto cristalizado en el terreno de juego con hombres como Thiago Alcántara, Alphonso Davies, Thomas Müller y Serge Gnabry, sin dejar de lado a Kingsley Coman, Ivan Perisic y Philippe Coutinho.
Los resultados son nítidos. En primera instancia, ha retomado el liderato en las Bundesliga, mantiene al equipo vivo en la Copa alemana y lo tiene prácticamente clasificado a los Cuartos de Final de la Champions League. De los 21 encuentros que Flick ha dirigido, el Gigante Bávaro ha ganado 18 (18-1-2), con saldo de 65 tantos a favor y sólo 13 en contra.