La selección femenina de futbol de Inglaterra sostuvo su pleno de puntos en el Campeonato del Mundo, que se disputa en Francia, al batir por un ajustado 1-0 al combinado de Argentina en su segundo compromiso del Grupo D.
No pudo el equipo celeste y blanco brindar el resultado que pretendía a sus pioneras.
El triunfo, por 4-1, logrado ante Inglaterra por las mujeres que en el año 1971 abrieron camino en el estadio Azteca no tuvo su réplica este viernes en el Stade Océane de Le Havre.
Las Lionesses permanecen como líderes invictas de su grupo tras ganar a Escocia y someter a Argentina, con un solitario gol de Jodie Taylor (min. 60).
El marcador reflejó la lógica y es que la Albiceleste está inmersa en un proceso de reinvención tras haber abandonado la actualidad de su equipo femenino durante casi un lustro.
Compite en este Mundial con una generación donde son minoría las futbolistas profesionales, en contraposición con el bloque de Phil Neville. El técnico inglés, no obstante, situó en 15 años la diferencia de desarrollo entre uno y otro conjunto.
Argentina, con su apuesta por la lucha y la entrega, a punto estuvo de rescatar algún premio del Stade Océane. En la cubierta del estadio encontró algo de complicidad la Albiceleste, puesto que está bañada de un intenso azul, pero sobre el césped mandó el rojo.
Le dio tiempo, en todo caso, a Vanina Correa a dar a conocer su historia al mundo. Madre de mellizos, estaba totalmente retirada del futbol cuando el seleccionador argentino Carlos Borrello la invitó a volver. Fue protagonista, con sus paradas, en la primera mitad.
Se permitió incluso detener un penalti a Nikita Parris en el minuto 26. No tuvo tanta fortuna tras la pausa. Se agrietó la resistencia del equipo austral y Jodie Taylor fue letal en el área.
FCM