Los futbolistas brasileños del Shakhtar Donetsk y del Dínamo y sus familias que estaban en un hotel de Kiev consiguieron dejar la capital de Ucrania en un tren que los transportará hasta la frontera con Rumanía, según anunció este sábado el Ministerio de Relaciones Exteriores.
El grupo de casi 50 personas fue avisado con 40 minutos de anticipación para ir hasta una estación próxima y desde allí tomar un tren que fue alquilado hasta Chernivtsi, cerca de la frontera con Rumanía y donde una misión diplomática brasileña que se desplazó desde Bucarest los recibirá.
El canciller, Carlos França, "activó el Grupo de Trabajo 'Brasileños en Ucrania', un núcleo de apoyo a los nacionales en ese país y que será el encargado de coordinar las acciones de emergencia e implementar un plan de contingencia para la retirada segura y ordenada", citó en nota el Ministerio.
Sin embargo, el jugador de fútbol sala Matheus Ramires, que formaba parte del grupo, relató al canal Globonews que después del almuerzo fue a bañarse y cuando retornó el grupo ya había dejado el lugar sin avisarle.
"Todos queremos salir, todos somos brasileños. Muy bueno que pudieron hacerlo, pero yo en ningún momento hubiese dejado un brasileño atrás. De hecho, cuando el club nos trajo para el hotel presionamos para que un estudiante brasileño viniese al 'búnker'", dijo el jugador del Skyup de Kiev.
La acción se dio pocas horas después de que el grupo de jugadores y familias transmitieron un vídeo por Instagram, el segundo en dos días, en el que apelaban a la ayuda del Gobierno y humanitaria internacional para ser escoltados hasta la estación de tren dispuesto por la Embajada de Brasil.
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) también indicó, pero sin dar detalles logísticos de la operación, que tiene dos aviones multimisión KC-390 Millenium para un posible transporte de sus ciudadanos y otros suramericanos que se encuentran en Ucrania, país que fue invadido por fuerzas militares rusas.
De hecho, la Cancillería brasileña indicó que otros brasileños y ciudadanos suramericanos consiguieron pasar la frontera con Rumanía y están ya con la misión que se desplazó desde Bucarest y aguarda al grupo de deportistas y sus familias.
MGC