Pep Guardiola y su Manchester City recuperaron la inercia en la Premier League tras doblegar al Arsenal de Mikel Arteta, en un encuentro que se decidió con el tanto de Raheem Sterling (1-0).
La diana del inglés fue suficiente para que un City sin muchos alardes consiguiera mostrar por fin solidez defensiva y se impusiera a un Arsenal algo espeso de tres cuartos de cancha para arriba.
Los celestes dieron la sorpresa en la alineación porque Sergio Agüero partió como titular cuatro meses después de la lesión de rodilla que le obligó a pasar por quirófano. Ante la baja de Gabriel Jesús, Guardiola tiró de Agüero y el argentino no tardó en responder, puesto que fue el jugador que condujo la contra del primer gol.
El 'nueve' abrió para Phil Foden, que se abrió hueco con un toque y sacó un rápido disparo que no sorprendió a Bernd Leno. El alemán rechazó el esférico, pero le cayó a Sterling. El inglés controló y con la pierna izquierda definió a puerta vacía ante la inútil mirada de Leno.
El gol terminó con la producción ofensiva de un Manchester City que tuvo suerte de irse con ventaja al descanso. Bukayo Saka dispuso de dos muy buenas oportunidades para hacer el empate, pero sus dos manos a mano los sacó Ederson, el mejor del City en la primera parte.
Además, para fortuna de los de Guardiola, ni el colegiado ni el VAR vieron una posible acción de penalti de Kyle Walker, que levantó en exceso la pierna en un córner, pero Kavanagh se apresuró para pitar el final de la primera parte y no hubo revisión.
Aunque al City le faltaba Kevin De Bruyne, no tenían problemas para controlar con cierta comodidad la posesión y llegar con frecuencia a la meta de Leno, eso sí, sin prácticamente peligro. La mejor noticia para los celestes era que Ruben Dias y Nathan Aké, ambos fichados este verano, funcionaban atrás, dejando la puerta a cero y evitando las embestidas de Pierre-Emeric Aubameyang, Willian y Alexandre Lacazette, que salió en la segunda mitad.
Tanto fue así que el equipo de Arteta tuvo que recurrir al balón parado para acechar a Ederson y la más clara para nivelar el marcador llegó en una falta de Nicolás Pepé que se marchó rozando el palo.
Al Arsenal le faltaron ideas para atravesar la línea defensiva del City y a los de Guardiola les bastó con el 1-0 para mejorar la dinámica en la liga.