El ex internacional alemán Bernd Hölzenbein, campeón del mundo en 1974, murió el lunes a los 78 años rodeado de su familia, tras una larga y grave enfermedad, según informó este martes su antiguo club, el Eintracht Frankfurt.
El jugador fue quien recibió la falta en la final contra Holanda que provocó el empate 1-1 para los alemanes con el tanto de Paul Breitner; después Gerd Müller marcó el 2-1 definitivo.
Tras este partido, muchos holandeses apodaron a Hölzenbein el inventor del piscinazo, aunque el jugador mantuvo siempre que "¡fue un penalti claro!". Marcó cinco goles en cuarenta partidos internacionales disputados entre 1973 y 1978.
"Holz", capitán honorífico del Eintracht, disputó con este club 532 partidos oficiales, en los que marcó 215 goles -160 en la máxima categoría- y ganó la Copa de Alemania en 1974, 1975 y 1981 y la Copa de la UEFA en 1980.
En 1981 puso fin a su carrera en la Bundesliga y se trasladó a Estados Unidos, donde jugó en el Fort Lauderdale Strikers, el Memphis Americans y el Baltimore Blasts.
Después regresó a Alemania, jugó otros seis meses en el Salmrohr y consiguió el ascenso a segunda división con el club. En 1988 regresó al Eintracht como vicepresidente.
FCM