Escena insólita este sábado en pleno partido de fútbol en Eindhoven entre las selecciones de Países Bajos y Montenegro: un niño saltó al césped con el objetivo de hacerse una fotografía con el atacante neerlandés Memphis Depay.
Cuando quedaban dos minutos por jugarse y la 'Oranje' dominaba 4 a 0 (con dos tantos de Depay), el niño apareció en el terreno de juego dirigiéndose al jugador del Barcelona con un teléfono móvil en la mano.
Sorprendido, Depay aceptó de buen grado hacerse el selfi con su joven fan.
El niño regresó muy contento a su asiento, corriendo, mientras el público ovacionaba. Los agentes de seguridad no le interceptaron.
MGC