Hoy 12 de junio se conmemora el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil, innumerables son los casos de captación de menores por parte de los clubes europeos que infringen las normas y leyes internacionales establecidas para combatir que los infantes laboren.
Los equipos 'disfrazan' esta práctica ofreciendo trabajo dentro de su organización a los padres de los adolescentes y niños que son observados como posibles futuras promesas para el futbol profesional.
Lo cierto es que, según cifras del Fondo de las Naciones Unidas (Unicef, por sus siglas en inglés), únicamente entre 5 y 10 niños de cada 100 que son reclutados llegan a convertirse en jugadores profesionales.
Para lograr la erradicación de esta problema, la FIFA ha comenzado a imponer sanciones hacia los clubes, que van desde lo económico hasta la prohibición de fichar por cierta cantidad de tiempo; esta cruzada ha castigado a equipos de la talla del Real Madrid, Barcelona, Chelsea, Liverpool y Atlético de Madrid.
La FIFA y Unicef han unido fuerzas para combatir este grave problema que afecta a muchas familias a lo largo del mundo, especialmente en Europa.
El máximo organismo rector del futbol en el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores estipula la prohibición de los fichajes si los jugadores son menores de 16 años cuando la transacción se hace entre clubes europeos y 18 años si es de manera internacional, además, en su artículo 18 menciona que los jugadores por debajo de los 18 no pueden firmar contratos por más de tres años.
En el artículo 19, FIFA expresa que existen excepciones sobre estos fichajes: que los padres del jugador cambien de residencia al país del club por acciones no relacionadas con el futbol, que el traspaso se dé dentro del Espacio Económico Europeo o la Unión Europea cumpliendo con otorgarle formación deportiva y académica además de óptimas condiciones de vida y, por último, que la distancia entre el club y el lugar de residencia del jugador no supere los 100 kilómetros.
El caso más reciente es el del Chelsea, que recibió una sanción de 500 mil euros, aproximadamente, y le fue prohibido fichar jugadores hasta el verano de 2020, por la supuesta contratación del burkinés Bertrand Traoré, en 2011, cuando el futbolista tenía 16 años.
Por su parte, el Barcelona también fue sancionado en 2014 sin poder fichar por un año por traspasos irregulares de jugadores por debajo de los 18 años; sin embargo, el club culé presentó una apelación con el argumento de que, en su escuela de formación, cumplen con lo estimulado en el reglamento y otorgan mejor calidad de vida a sus reclutados.