El PSG, entrenado por Luis Enrique, no logró hoy pasar del empate sin goles frente a un sólido Al-Nassr liderado por Cristiano Ronaldo, en un amistoso disputado en Japón con el trasfondo de la incertidumbre sobre Kylian Mbappé.
El partido jugado en el Estadio Yanmar de Nagai (Osaka, oeste de Japón) fue el primero de la gira preparatoria veraniega de ambos equipos, un tour marcado en el caso del PSG por la ausencia de última hora de Mbappé por su contencioso con el club y ante el interés del Real Madrid por ficharlo.
Sin su hasta ahora jugador franquicia, el ex seleccionador español optó por un 4-3-3 con Carlos Soler, Asensio y Lemina como jugadores más adelantados y dejando a Neymar de entrada en el banquillo.
El propio Soler probó al meta Al-Aquidi con un buen golpeo de falta apenas comenzado el partido, con un PSG embotellando al equipo saudí en su área y presionándole muy arriba a la salida del balón.
Pero el Al-Nassr logró estirarse conforme pasaban los minutos y buscaba siempre a Cristiano con balones largos o colgados al área. El portugués fue capaz de inquietar con su repertorio de remates de cabeza o de chilena, todos ellos jaleados por un público entregado al exfutbolista del Real Madrid.
El club saudí demostró no obstante que tiene más argumentos que CR7, con Talisca y Ghareeb incisivos por las bandas, los recién fichados Seko Fofana y Brozovic imponiendo físico en la sala de máquinas y una defensa capaz de contener las embestidas de los parisinos durante todo el partido.
Donnarumma evitó de hecho con un paradón que se adelantara el Al-Nassr en un remate de puntera de Cristiano al borde del área pequeña, la ocasión más clara de la primera mitad junto con un tiro desviado de Lemina.
Los pupilos de Luis Castro llegaron incluso a disputar la posesión al PSG en la segunda mitad y a generar peligro tanto en jugadas largas como en contraataques, ante unos parisinos que movían la pelota con parsimonia pero sin ver puerta.
Hacia la mitad de la segunda parte tanto Luis Enrique como Castro renovaron por completo sus onces, dejando el portugués fuera a su compatriota Cristiano y el técnico español dando entrada Ethan Mbappé, hermano pequeño de Kylian y de solo 16 años, y sin dar ni un minuto a Neymar.
El PSG apretó en el tramo final pero no lograba hacerlo con clarividencia pese a los futbolistas de refresco, en un partido que acabó con una oportunidad clara de los saudíes y con muchos aficionados parisinos extrañando a su gran figura e interrogándose sobre su futuro.
El PSG se medirá este viernes al Cerezo Osaka en esa misma ciudad nipona, y el martes de la próxima semana al Inter de Milán en Tokio, antes de viajar a Corea de Sur para otro amistoso frente al Jeonbuk.
El club saudí se enfrentará por su parte al Inter en Osaka este jueves.
ZZM