El gran evento de este 2022 sin lugar a dudas será la Copa del Mundo de Qatar. Incluso, esta competición pinta para ser histórica por dos razones: al celebrarse por primera vez en un país árabe –en la región del Medio Oriente– y porque se jugará en invierno.
Sí, las altas temperaturas que azotan suelo qatarí durante el verano, donde la temperatura llega a estar por encima de los 40 grados durante el día, provocó que una de las primeras decisiones trascendentales para esta edición mundialista fuera cambiar las fechas de competencia; de tal manera que ahora se jugará del 21 de noviembre al 18 de diciembre, en lugar de junio y julio, como fue con las últimas ediciones.
Será más competitivo
Si bien el cambio de fechas se dio para cuidar la integridad física de los jugadores y aficionados debido al calor extremo que hace en verano, el hecho de que la Copa del Mundo se juegue entre noviembre y diciembre puede provocar que se vea un nivel más alto de lo acostumbrado, debido a que los jugadores llegarán en pleno ritmo competitivo porque sus Ligas apenas irán a la mitad de desarrollo.
"Va a ser histórico, esa es la verdad, porque será la primera vez que se verá un Mundial en noviembre y diciembre. Para mí es positivo por los países que participen, ya que los jugadores llegarán sin fatiga, llegarán casi al cien por ciento. Si uno mira la Liga Inglesa, el nivel que hay en diciembre en su Boxing Day, que juegan casi a los dos días, pero ahora eso se verá en la selección”, comenta el ex futbolista internacional Yaya Touré a MILENIO-La Afición.
Con Costa de Marfil, Touré estuvo presente en tres Mundiales: Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014. Para él, el hecho que Qatar tenga todas las sedes en un radio de 60 kilómetros es una gran ventaja para el descanso de los futbolistas.
“Los traslados serán factor, hay viajes de solo 20 minutos entre el hotel y el estadio, o incluso a otro estadio, para el jugador será buenísimo y podrán estar siempre al cien por ciento; si antes se quejaban por la fatiga, yo creo que aquí no van a tener fatiga”.
Por tal motivo, el ex futbolista del Barcelona no se aventura a pronosticar algún favorito para quedarse con el título: “En Europa están Francia, Italia, también España, hay muchos equipos… también está Brasil y Argentina, y aunque no pasen por buen momento Uruguay y Chile. Como dije, hay tantos equipos y ahora van a llegar a la competición en diciembre, entonces yo creo que se verá en un 80 por ciento por arriba de la capacidad física”.
Eso sí, Yaya cree que Qatar quedará para la historia por estas razones: “Se jugará en un país árabe, eso será diferente y la gente tiene que disfrutar; será una alegría porque tendrán equipos al cien por ciento; en una región que lo recibirá por primera vez, así que será histórico”.
Unas por otras
Javier Mascherano sabe muy bien lo que es competir en una Copa del Mundo. Con Argentina estuvo presente en cuatro mundiales: de Alemania 2006 a Rusia 2018, quedando a un paso del título en Brasil 2014. Por eso valora de manera positiva el cambio de fecha, aunque matiza el descanso de los jugadores, también reconoce que se acortará el tiempo de trabajo para los entrenadores.
“En el aspecto individual del jugador será beneficioso. El jugador no llegará cansado, sino llegará fresco, llegará con ritmo de juego porque está dentro de la temporada”, explica.
Y de inmediato agrega quizá el único punto en contra: “En el plano colectivo, o al ponerme en la piel del entrenador, ahí sí tendrá menos tiempo para preparar el equipo, pero todos partirán en las mismas condiciones, además, hoy en día las selecciones están acostumbradas, por ejemplo, para las eliminatorias solo tienen de tres a cuatro días para preparar los juegos y para el Mundial ya se habla de solo 10 días antes de que comience, pero para el jugador será beneficioso”.
En las 21 ediciones que se han celebrado de la Copa del Mundo, el calendario siempre se centró en los meses de mayo, junio y julio; ahora, por primera vez, habrá un Mundial en invierno.
FCM