El Real Madrid venció 5-3 al Al Hilal y se proclamó campeón del mundo de clubes por quinta vez en su historia, este sábado en Rabat, en un duelo en el que mostró su exuberancia ofensiva ante un campeón asiático que se va con la cabeza muy alta.
Por el equipo blanco firmaron dobletes el brasileño Vinicius (13 y 69) y el uruguayo Federico Valverde (18 y 58), con un gol para el capitán Karim Benzema (54).
Los tantos del Al Hilal fueron obra del maliense Moussa Marega (26) y del argentino Luciano Vietto (63 y 78).
Con su triunfo, el Real Madrid amplía su dominio en la competición. Ha ganado cinco ediciones, dos más que el Barcelona -segundo club con más títulos-. Además tiene tres Intercontinenales -predecesor de esta trofeo- en sus vitrinas.
Mover rápido el balón
El Real Madrid tenía claro que mover el balón con velocidad en el estadio Príncipe Moulay Abdellah era la clave para desarmar al rival y ejecutó el plan sin contemplaciones.
Así cayó el primero de un divertido festival de goles: El equipo combinó hasta que Benzema leyó el desmarque al espacio de Vinicus, que levantó la vista y optó por rematar por bajo. El arquero y capitán Abudllah Almayouf tocó el balón antes de que entrara.
También estuvo a punto de parar la volea de Valverde que significó el 2-0 tras un mal despeje de una defensa sometida.
Si Vinicius señaló el escudo y se marcó un baile para celebrar, el uruguayo buscó a Carlo Ancelotti para darle un abrazo y agradecerle que haya seguido apostando por él a pesar de su reconocido bajón tras el Mundial.
"El Real Madrid está creciendo", había repetido en los días previos el técnico italiano, consciente de que el Mundialito es un trampolín perfecto para recuperar a su equipo tras un duro arranque de 2023.
En medio de los goles blancos había llegado la primera ocasión del Al Hilal, con un tiro que rozó el poste de Vietto (14). Con dos tantos de ventaja y 70 minutos por jugar el exceso confianza era el principal adversario del campeón europeo.
Y ocurrió. Un robo y un balón al espacio fueron un caramelo en la puerta de un colegio para un atleta como Marega, que ejecutó al arquero Andriy Lunin con un potente disparo.
Antes del descanso el último destello blanco fue un balón colgado por Valverde que Benzema remató de primeras no lejos de uno de lo postes (41). A la siguiente no falló. Fue Vinicius el que centró desde la izquierda con el exterior para que apareciera en el corazón del área y marcara.
Vietto, doblete de clase
Valverde, ya goleador en semifinales, selló su doblete al tirar una pared con Dani Carvajal y rematar desde prácticamente el área pequeña.
Quedaba media hora por jugar y Ancelotti retiró a Benzema, que recibió una espectacular ovación. El público también despidió a lo grande a Luka Modric minutos después.
El brillante ataque blanco contrastaba con la fragilidad de su defensa. Vietto ganó la espalda a Antonio Rudiger y definió con gran clase para poner el 4-2.
Vinicius cerró la cuenta blanca al aprovechar un regate que se le fue largo a Dani Ceballos, que había salido minutos antes. El partido estaba roto y Vietto, en una bonita maniobra, se dio la vuelta para firmar también su doblete.
A continuación fue Marega el que tuvo un remate clarísimo que hubiera puesto picante al cierre del partido (80). Falló y el Al Hilal se rindió ante un equipo letal desde 2014: cinco veces campeón europeo y ya cinco veces campeón mundial.
FCM