El derbi asturiano quedó en manos del Real Oviedo, quien se impuso 0-1 a su archirrival, Real Sporting esto gracias a un error defensivo en el que el zaguero Juan Berrocal mandó el balón dentro de su propia meta en la cancha del Molinón, situación que generó descontento en el centenar de aficionados que se dieron cita en el Centro Asturiano de la Ciudad de México, donde la Liga de España realizó este evento para los fans de ambos conjuntos asturianos.
La suma de estos tres puntos, le permite a los Pitufos mantenerse en el sexto puesto de la tabla general con 57 puntos, contexto que creó un ambiente relajado y de satisfacción en los fanáticos del Oviedo, por su parte los rojiblancos mantienen la distancia en el tema porcentual ubicándose en el lugar 17 con 41 unidades.
A pesar de que la visita se llevó la victoria, reinó la paz, el buen ambiente, la camaradería y el amor entre los seguidores de ambos conjuntos.
¡Se salvaron!
Entré botanas típicas asturiana, playeras de ambos equipos, trofeos, balones y hasta un futbolista, los seguidores del Real Sporting y Real Oviedo disfrutaron de un partido que fue de menos a más arrebatando el grito de gol de los seguidores del Oviedo. Tras un gran desborde por la banda de la izquierda, Borja envió un centro templado al corazón del área, justo a la posición de Luismi, quién completamente solo sacó un remate de volea, el cual parecía incrustarse en la meta, pero ‘Pichu’ Cuellar se lanzó y como superhéroe despejó el peligro de su meta, Gracias a esta espectacular atajada del arquero, los seguidores rojiblancos se levantaron de sus asientos festejando con aplausos y porras como si hubiera sido gol.
La polémica no podía faltar en este Derbi, el árbitro central, Trujillo Suárez decidió no marcar una mano clara del defensor rojiblanco Babin, la cual ni siquiera fue digna de revisión en el VAR. Esta mano provocó el descontento de los Pitufos, quienes desde sus asientos en el centro asturiano abuchearon y silbaron esta decisión, mientras los del Sporting se reían discretamente.
En los minutos finales el ánimo se encendió, ya que los rojiblancos buscaron abrir el marcador en su propia casa, pero la zaga visitante y Femenías evitaron cualquier sorpresa yéndose al descanso con un 0-0,
En el complemento, el duelo se convirtió en una guerra en la mitad de la cancha, ninguno de los dos equipos cedía terreno, mientras en el Centro Asturiano esto fue suficiente para desentenderse por un momento del encuentro, pues algunos se dispusieron a platicar, otros a jugar en el futbolito, mientras otros se acercaron al ex futbolista de Pumas, Real Sporting y Selección Mexicana Luis Flores.
Cuando el encuentro se acercaba a la recta final y con pocas aproximaciones de peligro, llegó el grito de gol, el cual ensordeció a todos los presentes. Tras un centro de Cornud, Berrocal intentó despejar la esférica, pero culminó enviándola dentro de su propia meta, convirtiendo el Centro Asturiano en un manicomio, donde con brincos, aplausos festejaron el tanto y la victoria.
Tras el silbatazo final, los colores no importan, pues todos como una familia convivieron y platicaron sobre futbol, mientras degustaron algunos alimentos.
FCM