El Real Madrid arrancó su andadura en la Champions League femenina con una derrota (3-2) ante el Chelsea, uno de los máximos favoritos al título, en un encuentro en el que las de Alberto Toril pagaron su falta de contundencia en las dos áreas, especialmente en la propia, todo lo contrario que el equipo inglés.
No pudo empezar peor el encuentro para el conjunto blanco que apenas transcurridos dos minutos de juego ya marchaba por detrás en el marcador (1-0) con un gol en propia meta de Sheila García.
Todo un mazazo para las de Alberto Toril que sin saber muy bien cómo, se encontraban en desventaja ante un Chelsea que prácticamente no necesitó nada para tomar la delantera en el tanteador.
Una segunda jugada tras un saque de esquina que llegó a los pies de la sueca Johanna Rytting Kaneryd que puso un balón colgado para la cabeza de la alemana Sjoeke Nusken, que vio como su remate acabó en el interior de la portería tras ser desviado por Sheila García.
El peor escenario posible para un Real Madrid que no tardó en verse amenazado por los fantasmas del pasado año, cuando se despidió de la fase de grupos de la máxima competición continental sin lograr ni un sólo triunfo.
Pero este curso el equipo madrileño parece un conjunto mucho más sólido, tal y como demostró este martes en Stamford Bridge, donde supo reaccionar con madurez al tempranero tanto del Chelsea.
De hecho, las de Alberto Toril se hicieron con los mandos del juego en los siguientes minutos, aunque sin la contundencia necesaria para inquietar realmente al Chelsea.
Todo lo contrario que el equipo inglés al que le bastó otros saque de esquina para forzar a los veintisiete minutos el penalti, que la noruega Guro Reiten se encargó de transformar en el 2-0, en un acción en la que María Méndez derribó en el interior del área a Lucy Bronze al tratar de despejar el balón.
Otro varapalo para el Real Madrid al que, sin embargo, el conjunto blanco supo responder con carácter y personalidad, lo que le permitió volverse a hacer con las riendas del encuentro.
Un buen juego al que las de Toril lograron añadir en esta ocasión la dosis de pegada necesaria para soñar con lograr algo positivo en su visita a Londres, tras recortar a los treinta y nueve minutos su desventaja (2-1) con un gol de Alba Redondeo que culminó una acción iniciada por Olga Carmona en la banda izquierda.
Pero la falta de contundencia en su propia área volvió a condenar al Real Madrid, que a los ocho minutos de la segunda parte vio como el Chelsea volvió a escaparse de nuevo en el tanteador (3-1) con el gol de la colombiana Mayra Ramírez.
La delantera 'cafetera', exjugador del Levante, demostró el porqué de su condición como el fichaje más caro del fútbol en la historia del fútbol femenino inglés, al ganar con facilidad la partida a su par y cabecear a las redes un centro desde la banda derecha de Lauren James.
Ni así se rindió, sin embargo, el Real Madrid que encontró nuevo bríos en ataque con la entrada al terreno de juego de Eva Navarro, la francesa Naomie Feller y, sobre todo, la colombiana Linda Caicedo, que devolvió la esperanza al conjunto español tras establecer a los 84 minutos el 3-2 tras aprovechar un balón suelto en el área tras un remate de Eva Navarro.
Seis minutos finales en las que las de Toril pese a no dejar de intentarlo no pudieron evitar una derrota que castigó la falta de contundencia, especialmente en el área propia, de un conjunto blanco que demostró tener el juego necesario para poder plantar cara a todo un favorito como el Chelsea.
CGHR