El central del Barcelona Gerard Piqué sorprendió a todos al anunciar que colgaba las botas, una decisión llegada en medio de una pérdida de protagonismo sobre el campo y que ayudará a aliviar las finanzas del Barça.
Desde el punto de vista deportivo, el central azulgrana, ganador de 30 trofeos con la elástica del Barcelona, entre ellos tres Champions y ocho Ligas, había perdido protagonismo deportivo esta temporada.
El técnico Xavi Hernández ya le había advertido, según la prensa, que no sería la primera opción en la zaga.
Piqué apenas ha participado en nueve encuentros en lo que va de temporada y en muchos, como último recurso.
Sus errores en el partido de Champions contra el Inter de Milán, en el que el Barça se jugaba prácticamente todas sus opciones de pase a octavos (empate 3-3) le dejaron señalado y oyó los pitos de la grada.
"Piqué es un tipo de carácter fuerte, protagonista y poco acostumbrado a jugar los minutos basuras o los partidos intrascendentes. Y deber ser muy difícil para él soportar que el Camp Nou le silbe", afirma Santi Nolla.
El propio jugador ya había advertido en 2019 que "si veo que pierdo importancia o veo que no estoy al nivel no tendré ningún problema en irme antes".
Fiel a su palabra, su caída de rendimiento, a sus 35 años, le lleva a dar un paso, que también supondrá un alivio para las arcas del club.
"El Barça se ahorrará como mínimo unos 50 millones (de euros/48,9 millones de dólares) con la salida de Piqué, que perdonará al club el año y medio que le queda de contrato", afirma el diario As.
En un club lastrado por la masa salarial, el vicepresidente económico del Barça, Eduard Romeu, había señalado que "hay una serie de contratos que tienen un coste muy elevado", lo que se interpretó como una alusión a jugadores como Piqué o Jordi Alba.
Piqué tiene en mente algún día regresar al Barcelona
"Gerard entiende perfectamente la situación del club con respecto al fair play y la masa salarial deportiva. Hay una gran disposición por parte del jugador de ayudar al club", dijo el presidente azulgrana, Joan Laporta, el jueves a la televisión del club, afirmando que trabajan en la resolución del contrato del central.
Al tema deportivo se unen los difíciles meses vividos por Piqué fuera de los terrenos de juego con su mediática separación de la cantante colombiana Shakira, con la que tiene dos hijos.
La figura del jugador también se vio un tanto desgastada por la polémica en torno al cobro de comisiones por parte de Kosmos, la empresa de eventos deportivos presidida Piqué, para llevar la Supercopa de España a Arabia Saudita.
"Últimamente se veía una cara de tristeza que no era propia de él, su cara demostraba que no estaba feliz", aseguró el jueves el ex seleccionador Vicente del Bosque, con el que Piqué fue campeón del Mundo y de Europa.
Piqué se va, pero nunca ha escondido su deseo de ser presidente del Barcelona algún día y como advirtió en su vídeo de despedida "tarde o temprano, volveré".
DAO