Vinicius Junior es un jugador fuera de serie, un tipo que arranca con la pelota y parece un meteoro fulgurante e imparable. Considerado uno de los mejores futbolistas del planeta, es un símbolo del Real Madrid y también un icono mundial del balompié.
Sin embargo, al margen de la gran calidad futbolística que le rodea, en los últimos tiempos, el delantero brasileño ha sido también un protagonista de acontecimientos ligados al racismo, porque -desafortunadamente- ha sido objeto de muchos ataques en diversos campos.
A Vinicius muchas personas del mundo del futbol lo han calificado como provocador, porque es un jugador que levanta la voz, le gusta encarar a sus rivales y algunas de sus actitudes no son bien vistas por sus rivales ni por las aficiones contrarias.
Lastimosamente, en las gradas se ha sobrepasado la pasión por el futbol y algunos forofos, en diferentes estadios de España, han perdido la cabeza y han lanzado insultos raciales hacia un jugador que no se ha quedado callado.
El recuento de insultos que ha recibido el brasileño fueron denunciados por LaLiga en diferentes ocasiones, pero los que empezaron a tener eco fueron los que se produjeron en mayo del año pasado cuando el Madrid visitó Mestalla para medirse al Valencia.
En aquel partido, el brasileño escuchó gritos de mono, los denunció al árbitro, De Burgos Bengoetxea, señaló al agresor el cual fue expulsado del campo y llegó a amenazar con retirarse del campo, incluso algunos futbolistas del conjunto naranjero le buscaron y tuvieron un altercado con él, aunque el VAR intervino, se fue expulsado por soltar un manotazo.
Sanciones judiciales
Tras las denuncias de LaLiga y del propio Real Madrid de aquel incidente en el que fueron identificados tres aficionados del Valencia, el pasado 10 de junio en los juzgados de España se dio, por primera vez en la historia, la condena para los implicados fue de ocho meses de prisión y dos años sin poder asistir a un estadio de futbol.
Una medida que podría considerarse ejemplar, pero que no ha tenido un impacto en otros aficionados a los que se les siguen cruzando los cables cuando acuden a un estadio de futbol y también en redes sociales, una plataforma en la que el brasileño también ha sido objeto de ataques.
Eso sí, hay que tener claro que desde siempre Vini ha sido un luchador constante contra los ataques raciales y no desde que fue víctima, el expediente de insultos en su contra es muy grande, pero no ha flaqueado en la lucha, incluso ha salido a trasladar su apoyo a otros compañeros que han sido víctimas de algún ataque racial.
"Este fin de semana, ni siquiera jugaré. Pero tuvimos tres casos despreciables de racismo en España solo este sábado. Todo mi apoyo a (Marcos) Acuña y al entrenador Quique Flores, del Sevilla. (Cheikh Sarr) y al Rayo Majadahonda que su valentía inspire a los demás. Los racistas deben ser expuestos y los partidos no pueden continuar con ellos en la grada. Solo tendremos victoria cuando los racistas salgan de los estadios directo a la cárcel, lugar que se merecen", publicó en su cuenta de X ante los ataques que sufrieron en marzo de este año.
La semana pasada, el Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca impuso una pena de un año de prisión y tres años de prohibición para acceder a los estadios al aficionado que profirió insultos racistas en el estadio de Son Moix contra Vinicius Junior y Samu Chukwueze (entonces jugador del Villarreal).
Los hechos ocurrieron el 5 de febrero de 2023 en un partido de LaLiga entre el Mallorca y el Real Madrid y el 18 de febrero del mismo año, en otro partido disputado en el mismo estadio de Son Moix entre el conjunto bermellón y el Villarreal.
Las denuncias, iniciadas e impulsadas por LaLiga, se resolvieron por Delitos de Integridad Moral con la agravante de discriminación por motivos racistas y aplicando asimismo la atenuante de arrepentimiento.
Sí Vinicius ha tomado una bandera en la que todo el mundo debe sumarse: la lucha franca, abierta y sin temor contra el racismo.
RGS