El delantero sueco del LA Galaxy, Zlatan Ibrahimovic inauguró este martes en Malmo, su ciudad natal, una estatua suya erigida por la Federación sueca como homenaje a su carrera.
La estatua -en bronce, de casi 3 metros y unos 500 kilos de peso- muestra al jugador en pantalón corto, alzando los brazos en uno de sus típicos gestos de celebración de un gol, y ha sido colocada en la plaza situada entre los dos estadios de futbol de Malmo.
En su base aparecen inscritos los títulos logrados por Ibra, de 38 años, en una larga carrera que ha incluido, entre otros, el Ajax, el Inter, la Juventus, el Milan, el Barcelona y el Manchester United, con varias distinciones como máximo goleador y la condición de jugador que más goles ha marcado con la selección sueca.
"Este es un símbolo para los que no se sienten bienvenidos, no encajan o sienten que no son como los otros. Si yo puedo, cualquiera puede. No soy más especial que nadie, aunque sea el mejor en lo que hago", afirmó el jugador sueco de origen bosnio-croata.
Ibrahimovic dijo que era un "gran día" para él y que después de dos décadas como profesional, sentía que el círculo se cerraba en Malmo con la estatua, aunque aseguró que seguirá jugando mientras el físico se lo permita.
La Federación Sueca de Futbol reveló durante una gala en 2016 que homenajearía a Ibrahimovic con una estatua por ser el máximo goleador nacional de la historia.
La idea inicial era que la escultura fuera colocada delante del estadio nacional Friends en Estocolmo, pero fue descartada por el peso excesivo de la obra.
Horas antes de la inauguración, Ibrahimovic había causado una polémica al criticar en una entrevista con el diario Expressen al actual seleccionador sueco, Jan Andersson, por no haber incluido a jugadores de origen extranjero en su primera lista al asumir el cargo hace tres años, después de la retirada del delantero.
eml