El armado del plantel para el Torneo Apertura 2023 pone como meta a los Correcaminos de la UAT retomar el protagonismo perdido dentro de la categoría de plata del fútbol mexicano, donde en 7 años ha navegado por las aguas de la mediocridad. Para esta edición de la Liga de Expansión Mx, en el papel y en la plantilla, pinta para pelear por un lugar en la Liguilla.
Las adquisiciones de las últimas semanas, puestas a disposición del director técnico Edgar Solano, tienen su primer examen es la tarde de este sábado cuando en punto de las 19:00 horas en la cancha del Estadio Marte R. Gómez se midan con los Dorados de Sinaloa, conjunto también sumergido en la irregularidad.
La directiva naranja se hizo de los servicios de varios jugadores con experiencia en el circuito incluso con campeonatos y finalistas en anteriores ocasiones caso los ex jaibos Diego Hernández y Fabián Salas, el ex atlantista Vladimir Moragrega, así como el colombiano Juan Angulo, proveniente de los Alteños de Tepatitlán.
También ponen su confianza en Erick Espinosa tras el buen torneo que mostró en el último semestre con los Coyotes de Tlaxcala, además de la incorporación de Joan Maleck, antes seleccionado mexicano y cuyas condiciones de ataque le dan una variante al esquema de los victorenses.
El cuerpo técnico decidió darle continuidad al esquema defensivo, con la mayoría de los elementos como Juan Pineda, Luis López, Francisco Tede y Gerardo Moreno, además de Alexis Andrade para defender la campaña. De esta forma y al seguir Giovanni Hernández, Jorge Sánchez y Daniel Amador, el proyecto es ser más ofensivos y sobre todo contundentes.
La ventaja para los plumíferos es la eliminación de la tabla de porcentaje, al menos para esta campaña, sin embargo, el diseño está puesto para recuperar un lugar que desde su descenso en 1995 se ganó en el campo, ser contendiente serio al título.