Cruz Azul cumplió el trámite y ya, 4-0 en la vuelta y el pase a los cuartos de final de esta edición de la Concachampions es lo único rescatable de la serie frente al Portmore de Jamaica. Sí, se sabía de antemano que esta llave estaba muy desnivelada y que La Máquina, por más que haya batallado en la ida con esa voltereta en tiempo de compensación, tenía que avanzar sí o sí.
Y lo hizo sin tanta brillantez como se hubiera esperado, aunque da la apariencia que Cruz Azul solo se dedicó a sobrellevar el juego tal como hizo con toda la serie. Incluso, la noche se antojaba tan tranquila que Robert Dante Siboldi no dudó en descansar a varios futbolistas claves de su esquema; por ejemplo, le dejó la defensa a Luis Romo y lo acompañó con tres canteranos: Jaiber Jiménez, Josue Reyes y Jorge García.
También mandó de inicio a todos los refuerzos que no han tenido cabida en la Liga gracias al buen paso que mantiene su escuadra, fue el momento para que Ceppelini, Alex Castro, Jonathan Borja y Lucas Passerini pudieran desempolvarse y tratar de llenarle el ojo al técnico uruguayo, pero con un rival tan limitado, los análisis deben ser más cautelosos.
Porque el Portmore llegó al Azteca sin posibilidad alguna, esa es la realidad, apenas habían pasado 15 minutos y Passerini, Orbelín Pineda –en dos ocasiones– y Ceppelini ya habían errado una opción clara.
Pero al 21' llegó un buen centro de Jorge García que Orbelín remató de manera espectacular con una media tijera para dejar el 1-0 y sentenciar la serie. Sí, es cierto que el equipo jamaicano se animó a ir al ataque, pero sin complicar a Guillermo Allison, quien fue titular en lugar de Jurado.
Ya en el complemento, al minuto 59, llegó el segundo tanto de La Máquina. Un centro por izquierda encontró a Lucas Passerini en el área, el argentino no tuvo problema alguno en superar a su marca y con un sólido cabezazo mandar la pelota a las redes.
Cruz Azul ya estaba cascareando, manejaba la pelota a placer y se encontró con un tercer gol a través de un penal que Ceppelini mandó a las redes. La Máquina siguió insistiendo con el afán de ampliar la ventaja y cayó el tanto de Borja.
Ya no hubo para más y los 18 mil aficionados que se dieron cita al Azteca salieron contentos con su equipo. En Liga va bien y en la Concachampions calentaron motores con este débil sinodal de Jamaica para lo que vendrá más adelante que, seguramente, será un reto mucho mayor.
FCM