Lo que Don 'Nacho' Trelles era capaz de proyectar muchas veces iba más allá de un terreno de juego, más para más de uno, su filosofía y enseñanzas se convirtieron en un estilo de vida que con el pasar de los años siguen practicando.
Daniel Guzmán fue una de las personas más allegadas al histórico del futbol mexicano, tanto, que para su cumpleaños 100, el “Travieso” le escribió una carta, simbólica si, como regalo y muestra del agradecimiento por lo que significó en su vida.
“Cuando cumplió 100 años fuimos pocos los futbolistas elegidos para estar en su mesa, estaba la gente de Cruz Azul, los campeones, algunos de UdeG y ese recuerdo de que me tomara en cuenta para estar ahí, no se me olvidará jamás, yo le regalé lo que más sentía plasmado en una carta, lo que había sido Don Nacho Trelles para mí, como entrenador y me da gusto que está en posesión de los hijos y nietos, sin duda, marcara mi vida y tendré la responsabilidad de compartir a las nuevas generaciones quién fue Don Nacho Trelles”, expresó.
En ella, expresó Guzmán en charla con La Afición, plasmó el sentimiento por un hombre con el que compartió de 1986 a 1989 mientras Trelles dirigidos a los Leones Negros, su penúltimo equipo del fútbol mexicano.
“Me hice la pregunta ¿Que le puedes regalar a un hombre de 100 años que ya lo tiene todo?, fue una noche previa a irme a Cuernavaca, expresé ahí que había roto las barreras hacia mi persona, nunca tuve un abuelo con quien convivir, él lo era figurativo, me hubiera encantado que mi abuelo fuera como él , que todas las pláticas que tengamos con la gente adulta, se escuchen, todos los días de mi vida lo voy a recordar por lo que me dejó en el caso familiar y personal”, dijo.
Ahí en un viaje a Monterrey al ‘Travieso’ le quedó una de las lecciones más importantes en su vida cortesía de Trelles y unos trabajadores a los que observaron desde un décimo piso.
“En una plática antes de jugar contra Monterrey, se acabó la charla y me dijo: ‘Daniel, quédate conmigo’. Estábamos en el piso 10 y abajo estaban unas personas que estaban moviendo llantas, algunas viejas y me hizo ver cómo chiflaban, cantaban, disfrutaban y me dijo: ‘Si el profesional se diera cuenta de lo que tiene, disfrutara el ser jugador, imitaríamos el ejemplo de estos chavos, que, ganando poco, disfrutan mucho’”, reveló.
Hoy el ‘Travieso’ enfocado en proyectos personales y siempre con la posibilidad latente de volver a los banquillos del futbol mexicano, se dice un orgullo de llevar el ADN de Trelles en todas y cada una de sus ideas.
“Todos los entrenadores fueron mis maestros, pero yo creo que mi sensey fue Don Nacho Trelles, comulgo mucho con su filosofía, rebasó esos límites que yo digo que se puede hacer de vez en cuando, no solo el entrenador - jugador, también puede ser el amigo, el maestro, el papá y eso significó mucho para mí, no solo aprendí en el aspecto profesional, para mí es un entrenador revolucionario, adelantado y como persona, las enseñanzas que me dejó, sin duda llevo algo del ADN de Don Nacho Trelles de los tres años que conviví cuando fue mi entrenador en la Universidad de Guadalajara”, finalizó.
MC