Los Venados de Mérida se van del Estadio Tamaulipas satisfechos del empate ante la Jaiba Brava del Tampico-Madero, pues para su entrenador Rigoberto Esparza, lucieron mejor que los locales al tener ocasiones de gol en el primer tiempo, pero con lo sucedido en la pretemporada y en una cancha dura, la igualada es positiva.
Dicho planteamiento le generó oportunidades en los primeros 45 minutos, expuso el estratega al finalizar el choque de la jornada 2 del Apertura 2024, al apuntar que faltan algunas piezas adquiridas antes del arranque en adaptarse al estilo, prácticamente similar al certamen anterior donde fueron superlíderes.
“Fue un partido muy parejo, muy dinámico, un juego muy complicado cómo lo esperábamos pero tuvo a dos equipos que intentaron ganar. Venir a Tampico luego de ser campeones y con el proyecto armado no es sencillo salir bien librado. Estuvimos más cerca, las ocasiones más peligrosas fueron para nosotros”, mencionó.
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Los yucatecos acumularon la segunda unidad, luego de igualar en el Carlos Iturralde frente al Tepatitlán. En el tema físico como táctico, al no tener una etapa de preparación conforme a los planeado, varios de sus jugadores todavía no están en las condiciones esperadas, sin embargo, los resultados le ayuden a tomar confianza.
“Trato de ponerle mi toque pero conservando muchas cosas buenas que se hicieron en un torneo histórico para el club.tuvimos una pretemporada difícil, con juegos de preparación cancelados por los huracanes, hay elementos como Diego Pineda que se integró hace unos días y potros van agarrando ritmo, pero la intención es competir fuerte”, expuso Rigoberto Esparza.
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Venados vuelven a su cancha en Mérida en la jornada 3, al encarar a los Toros del Celaya, con la misión de por fin obtener los primeros tres puntos del Apertura y enrachado como lo hicieron en el primer semestre del año.
EAS