El FootGolf llegó a México para quedarse. Con 105 participantes (97 hombres y ocho mujeres), el Acapulco Open arrancó con intensidad en el puerto, con la participación de estrellas como el argentino Matías Perrone (actual campeón del mundo) o el mexicano Enrique Reyes Retana, así como la incursión de ex futbolistas como Bruno Marioni.
Las reglas de este deporte son muy similares a las que se maneja en el golf: meter la redonda en un hoyo en la menor cantidad de toques, incluso se utilizan los conceptos, pero es aquí donde el futbol hace su aportación, cambiando la pelota por un balón y los palos por las piernas.
“La verdad es que está muy bueno el deporte, no me pongo metas ni objetivos, lo estoy disfrutando. Lo que le decía a los jugadores de FootGolf es que la mayoría son fanáticos, todos se fanatizan con el deporte y es lo que me está pasando”, aseguró Marioni en entrevista con La Afición.
Se hace un recorrido de 18 hoyos, los cuales tienen un diámetro del doble del balón. Al igual que en el golf, el participante se enfrenta a trampas de arena, agua, árboles y desniveles, elementos característicos en el campo.
Aunque puedan lucir en el papel como serios contendientes, lo cierto es que los ex futbolistas como Marioni han admitido que batallan para adaptarse a este híbrido e incluso les exige mucha concentración y técnica para acercar la pelota y evitar los obstáculos.
“Yo creo que es muy similar al golf, que tienes hoyos que los haces muy bien y te puedes confiar, pero el otro hoyo lo haces mal. Es un constante desafío, un deporte que vivo con adrenalina, en cada golpe, cada hoyo, estás retándote a ti mismo”.
SFRM