A un día de que se celebre la final del Mundial de Clubes entre Tigres y Bayern Múnich, el medio futbolístico ha opinado sobre este enfrentamiento. Tal es el caso del español Gaizka Mendieta –ex jugador de clubes como el Valencia, Lazio, Barcelona y ahora embajador de La Liga–, quien cree que el conjunto felino deber ser fiel a su estilo de juego y valora la decisión que tomó el André-Pierre Gignac de no venir solo a retirarse al futbol mexicano.
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“Gignac mismo, en el pico de su carrera, en un momento en el que pudo haber decidido quedarse en Europa, porque estoy seguro que tenía muchas ofertas, decidió ir a la liga mexicana; creo que la Liga mexicana lleva años rindiendo a grandísimo nivel y atrayendo jugadores”, dijo en conferencia virtual por las 90 temporadas de La Liga española.
Y enseguida agregó que México ya no es un destino para retirarse: “sin duda los futbolistas que sientan que no tienen cabida en los clubes en Europa, la liga mexicana es uno de los destinos por la complejidad que tiene y como ha mejorado estructuralmente; es una referencia internacional ahora mismo y ya no es una liga que anteriormente los jugadores iban al final de su carrera, eso ha cambiado hace bastantes años; si yo fuera jugador, sería una liga que exploraría, porque es competitiva y bien organizada”.
TIGRES, FIEL A SU IDENTIDAD
El mejor momento futbolístico de Gaizka Mendieta se dio con el Valencia, equipo en el que jugó dos finales consecutivas de la Champions League, 2000 y 2001; en la segunda enfrentó al Bayern Múnich, que se impuso en penales y que mañana será rival de Tigres en el Mundial de Clubes.
Al respecto, Mendieta asegura que lo peor que puede hacer el conjunto mexicano es solo enfocarse en su rival, cambiando su identidad, algo que a ellos les cobró factura.
“No osaría dar ningún consejo a un equipo que va a disputar la final del Mundialito, lo que sí puedo que cuando se juegan ese tipo de partidos, por experiencia propia, ante equipos como el Bayern, en el que la historia tiene mucho peso, la experiencia y la calidad colectiva e individual, son partidos en lo que los pequeños detalles cuestan mucho; son equipos que no perdonan, así que las opciones que se tengan hay que materializarlas y conceder el mínimo de fallos. Hay que ser muy fiel a la identidad, porque si has llegado ahí, es porque algo hiciste bien; en las finales se tiende a pensar más en el rival, creo que hay reivindicar lo que te ha llevado ahí y reforzar esa idea”.
ZZM