Todos nos quedamos con las ganas de ver debutar a Memo Ochoa en el arco del América... hasta sus propios compañeros.
Y es que de otra manera no podría explicarse la deformación que tuvo el equipo de Coapa en el primer tiempo frente a Morelia. Las Águilas, perdón, fueron bailadas ante su gente y en su casa.
Monarcas mostró que las grietas en la zona baja del América estaban mal resanadas y que, con poco, se le podía hacer daño.
Que los americanistas agradezcan a que Morelia no solo se sabe equipo mediano, sino que lo confirma con su tibieza a la hora de plantarse frente al arco del gigante con facilidad.