Un día te abres la frente al chocar con un rival en un balón aéreo, te vendan la cabeza para seguir en el juego y anotas una chilena para calificar a la Final del Mundial Sub 17, la cual ganaron tres días después y ganaste el Balón de Oro del torneo… pero otro día estás en el olvido y esos momentos de gloria pasaron a la memoria y algunas fotografías y videos de la época.
Esa fue la historia de Julio Gómez, quien tras ese momento en específico se ganó un apodo en específico: la Momia. Fue con ese gol del joven volante derecho con el que México derrotó 3-2 a Alemania la llave de semifinales que se celebró en Torreón… el resto es historia: el Tricolor derrota 2-0 a Uruguay en el Estadio Azteca y se proclaman campeones mundiales por segunda vez en su historia (inolvidable el 2 de octubre de 2005).
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Y fue un 7 de julio –un día como hoy– de 2011 que La Momia Gómez escribió el inicio del que parecía iba a ser una de las historias más exitosas de nuestro futbol. Pero aquella muestra de talento solo fue eso: un destello. Julio Gómez se perdió en el camino y no llegó a ser lo que se esperaba de él.
Una caída repentina
La Momia Gómez nació el 13 de agosto de 1994 en Tampico. Surgió en las fuerzas básicas de Pachuca y debutó en la Liga Mx el 22 de enero de 2011. Las coincidencias son interesantes: los Tuzos jugaron esa jornada 3 ante Santos en el Estadio Corona de Torreón, el mismo inmueble donde meses después logró su momento de gloria.
Pero la indisciplina terminó por pasarle factura. El éxito efímero le trajo mucha atención mediática y Julio Enrique no pudo manejar correctamente todo lo que eso conllevaba. La fama le llegó, pero no supo cómo equilibrar su vida y mantenerse en un buen nivel competitivo para seguir creciendo en el futbol.
“A lo mejor sí (perdió el piso), cuando eres joven y no tienes los pies sobre la tierra a lo mejor sí, en mi mente pasaba que ya había logrado todo y la verdad es que no, faltaba un recorrido grande. No solo era ser campeón del mundo, sino hacer una carrera en Primera y consolidarme”, reconoció La Momia Gómez el 4 de mayo de 2020, cuando era entrevistado vía telefónica por Mediotiempo.
No siguió en planes de Pachuca y llegó a Chivas… pero tampoco pudo despegar. Tuvo que intentar en la Liga de Ascenso con Correcaminos de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Cafetaleros de Tapachula, un breve momento en el máximo circuito con Jaguares de Chiapas, Zacatepec, Cruz Azul Hidalgo, Loros de Colima y Coras de Tepic, hasta que intentó en el proyecto alterno Liga de Balompié Mexicano con San José, en donde se le criticó por su descuidado físico. Se sabe que actualmente vive en Estados Unidos, ha probado suerte en ligas amateur por gusto al futbol e incluso ha terminado campeón.
Marco Antonio Garces, ¿el responsable?
El 11 de noviembre de 2021, Pachuca decidió renovarse tras terminar en el decimoquinto lugar del Apertura de ese año, por lo que despidieron a Paulo Pezzolano de la dirección técnica y a Marco Antonio Garcés como su director deportivo.
La Momia celebró en sus redes sociales por la salida de Garces, incluso dijo que se trató de una reacción que le sucedió al directivo por lo hecho en su gestión (2012-2021). “Bendito karma, algún día te iba a llegar tu hora. La mejor decisión del Pachuca”.
Recordemos que Julio Gómez salió de Pachuca en 2013.
OMCS