Ante la inminente reestructuración que sufrirá de nueva cuenta la Segunda División del futbol mexicano, la aún Liga de Expansión aqueja dos problemas fundamentales que han compartido varios de sus directivos consultados: la falta de rentabilidad y el poco peso que tienen los dirigentes de este circuito en la toma de decisiones.
Una Liga que no es negocio
Invertir en el futbol mexicano, incluso en la Liga de Expansión, tiene un alto costo, uno que ante la falta de interés del público (por la ausencia del ascenso) hace que pocos equipos puedan sortear sin pérdidas económicas, las cuales rondan los 15 millones de pesos en promedio, de acuerdo a algunos directivos consultados por Mediotiempo. La inversión mínima es de 18 millones de pesos y pueden alcanzar cifras superiores a los 50 millones, tal como lo han comentado en diferentes ocasiones clubes como La Paz, Dorados de Sinaloa y Morelia.
En promedio, un equipo de esa categoría necesita unos 37 millones de pesos para la operación, de los cuales el 50 por ciento lo distribuye en salario, un 37.5 por ciento en la operación administrativa y un 12.5 por ciento en viajes, hoteles y otros costes. Las principales vías de ingreso que tiene un club son: el subsidio de 20 millones de pesos que reciben 15 de los 18 equipos por parte de la Liga Mx; la venta de derechos de TV, por la que reciben 3 mdp anuales; venta de jugadores; patrocinios; los convenios y subsidios que varios tienen con los gobiernos locales, y lo poco que puedan generar en sus días de partido (matchday).
Pero entre todos estos rubros, hay dos que resultan claves: el subsidio de la Liga Mx y los contratos y/o alianzas que se realizan con los gobiernos locales. Sobre este último punto, las ‘figuras’ de apoyo van desde el comodato del estadio; aportaciones económicas para difusión de la marca o algún plan de desarrollo social; publicidad en uniforme, vallas de estadio y comunicación del club; además de condonación de impuestos. Por ejemplo, de acuerdo con la consulta hecha por Mediotiempo en la Plataforma Nacional de Transparencia, Tlaxcala realizó un convenio en 2021 con su estado por 6 millones de pesos para la difusión y marca del Gobierno de Tlaxcala y compra de boletos; Mérida, en 2022, firmó un convenio con el estado de Yucatán para la promoción del futbol profesional y no profesional por 3.2 millones de pesos; mientras que Cancún FC, en 2023, recibió 15 millones de pesos para el impulso del deporte, captación de talento, visorias, promoción por parte del gobierno de Quintana Roo.
Piden que se les escuche
Atlante es uno de los equipos más tradicionales del futbol mexicano; sin embargo, desde 2014 juega en la categoría de plata. Y desde ahí en los últimos años ha armado un proyecto deportivo con el que espera regresar a primera. Méritos no le han faltado, pues ha ganado los títulos del Apertura 2021 y 2022 en estos tres años, incluso el Campeón de Campeones de 2022, que en el anterior formato ya le hubiera dado su cupo en la Liga Mx. También, el conjunto azulgrana ha hecho una fuerte inversión para obtener la certificación. Sin embargo, hasta el momento, el ascenso parece una quimera. Por tal razón, Emilio Escalante pide que se les tome en cuenta para la siguiente reestructuración que viene para esta categoría.
“Ellos ven por su Liga que es la Liga Mx y creo que no han volteado a ver a esta Liga, no se han puesto a ver qué puede ser muy importante si la enfocamos bien y si se hace bien el trabajo que tenemos que hacer todos. Si no conocen sobre lo que quieren hacer, si no conocen también nuestras ideas, de lo que queremos en conjunto con la Sub-23, pues a lo mejor ellos no pueden tomar ciertas decisiones. Atlante merece estar en Primera”, dijo el presidente de los Potros de Hierro.
De igual forma se manifiesta Alberto Castellanos, presidente de Leones Negros de la UdeG y una de las voces que más han peleado por el regreso deportivo del ascenso para revivir este circuito.
“Han existido repercusiones fuertes en la economía de los clubes; ninguno tiene números negros o que apenas alcanza para sostener, claro, cuando pones horarios para que juegues martes, miércoles o jueves, para empezar ni quien te vea en la televisión ni quien vaya al estadio y eso va en deterioro de tus finanzas; cuando existía el ascenso teníamos un promedio de entrada de 11 mil personas en el año y ahorita llegamos a 4 mil contando Liguilla y eso va en detrimento de las finanzas, la gente no tiene la motivación para la compra de camisetas”, señaló.
De esta forma los dueños de la Liga de Expansión buscan subsistir bajo estas condiciones, aun en números rojos.
AVV