La combinación del rojo con el blanco y el negro respectivamente han creado una división histórica en Guadalajara. El Clásico Tapatío es el partido más esperado por la Perla de Occidente; un partido que puede presumir de ser el clásico más añejo del futbol mexicano y que desde hace medio siglo enfrenta dos equipos que contrastan en títulos, pero que actualmente tienen más en común de lo que creen, sobre todo, por algunas figuras.
Antonio Briseño podrá ingresar a la lista de 63 jugadores que han portado ambas camisetas. Cuando el ‘Pollo’ fue campeón del mundo con la selección mexicana sub 17, defendía los colores rojinegros, pero en la actualidad no esconde su cariño por el Rebaño. No sería el único central en jugar para Chivas y Atlas, pues Fernando Quirarte también ha estado en ambas instituciones, tanto en su faceta de jugador como en la de entrenador.
El ídolo de la portería rojiblanca en la época moderna también tuvo su paso con los Zorros; Oswaldo Sánchez debutó en La Madriguera y terminó por consolidarse en el chiverío, donde incluso adquirió tintes de santo. También Ignacio Calderón, otro de los íconos del arco en el Guadalajara, llegó a jugar para los rojinegros.
Quizás el caso más polémico es el del máximo anotador en la historia del Rebaño. Omar Bravo fue jugador de Atlas durante todo el 2013, justo antes de encarar su última etapa con Chivas, donde terminó superando a Salvador Reyes como máximo anotador del Guadalajara.
Otros jugadores como Crescencio Gutiérrez, Jaime Pajarito, Daniel Guzmán, Jared Borguetti, Juan Pablo Rodríguez y hasta la figura actual de los rojiblancos, Isaac Brizuela, han vestido las dos playeras más distintas en Guadalajara. En muchos casos, las promesas de no vestir los colores del rival se han quedado solamente en palabras.
JMH