Siendo la primera ocasión en ponerse detrás del marcador, la capacidad de respuesta es el aspecto más rescatable para el cuerpo técnico de la Jaiba Brava del Tampico-Madero, tras el empate obtenido en cancha de los Coyotes de Tlaxcala al mediodía del pasado domingo, permitiéndoles conservar el invicto y seguir en los primeros lugares de la Liga de Expansión.
Para el director técnico Marco Antonio “Chima” Ruiz, lo tranquiliza tener elementos en la banca dispuestos a resolver los partidos en momentos difíciles. Así sucedió en la cancha del Estadio Tlahuicole, viniendo de un gol tempranero y superando las malas condiciones del campo a fin de sumar una unidad, llegar a 21 puntos y estar a tiro de piedra de poder recuperar la cima del Apertura 2025.
“Destacado la reacción del equipo, intentaron, no bajaron los brazos, por eso no es casualidad que este plantel pague invicto en el torneo, con una derrota en 22 partidos. Tuvimos que venir de atrás, lo hizo por todos los medios, con dos puntas en el ataque, después modificamos el medio campo, jugar por fuera, ingresaron elementos con más llegada por las bandas y e gol fue un justo premio a no rendirse”, dijo el estratega tras finalizar el choque.
Aunque todavía le falta contar con toda la plantilla completa, luego de las lesiones que se han presentado elementos de ataque, la entrada de pupilos enchufados tanto en la idea de fútbol y con la determinación de al menos emparejar los cartones, fue aplaudido por el entrenador.
“Hay muchas variantes, elementos con confianza, se matan en cada entrenamiento por una oportunidad, lo hicieron muy bien y si bien nos faltan algunos jugadores en la parte ofensiva, pero a quién le toque estar en el campo el plantel tiene clara una idea de juego. Me gustaría estar con todos los elementos disponibles para la etapa final del torneo”, añadió Marco Antonio.
Los porteños quieren dejar atrás lo sucedido en tierras tlaxcaltecas pues de inmediato debe prepararse para el duelo pendiente de la jornada 10, recibiendo a los Mineros de Zacatecas, peligroso pues con el cambio de técnico agarraron nuevos bríos y se demostró en el triunfo obtenido contra los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara.
“Los muchachos sostienen ese compromiso, tenemos la espinita clavada, nos quedamos a dos minutos de ser campeones, pero eso ya pasó. Sabemos que debemos ir paso a paso, partido a partido, ya logramos estar ahí y nos sentimos capaces de volver e intentar obtener el campeonato”, concluyó.