América tomó la ventaja primero, pero no resistió y una mano los condenó. Cuando parecía que el penal de Roger Martínez les iba a dar la ventaja mínima, los Portland Timbers no dejaron de apretar el acelerador y encontraron luz con una mano americanista: Felipe Mora lo igualó en el añadido y el partido terminó con un empate 1-1.
Una decisión polémica por donde se le vea: una falta de Felipe Mora sobre Bruno Valdez provocó la caída del defensor, por lo que el balón tocó su mano. Pese a que la jugada se revisó en el VAR, la pena máxima se decretó y, sobre la hora, Portland anotó y abrió la serie, que podrá ser para cualquiera el próximo 5 de mayo en el Estadio Azteca.
De más a menos
El partido comenzó lento en ambos lados de la cancha, con los equipos plantándose para frenar al rival, pero con poco ritmo como para generar peligro. A los 19 minutos, Mauro Lainez se aventuró con un zurdazo que pasó demasiado lejos de la meta rival, mientras que un minuto antes, Felipe Mora, el ex Pumas, se llevó una tarjeta amarilla por una dura entrada sobre Álvaro Fidalgo.
La primera oportunidad peligrosa la tuvo América (23’), cuando Roger Martínez sacó un riflazo cruzado desde el exterior del área, pero Jeff Attinella anticipó correctamente y mandó a saque de esquina. De poco a poco, América se acercaba, pero el guardameta rival defendía bien su arco.
Cuando parecía que el partido se iba ir al descanso en blanco, llegó el penal a favor de las Águilas. El argentino Claudio Bravo llegó tarde a una jugada y cometió una fuerte barrida sobre Richard Sánchez, por lo que el árbitro no dudó en pitar la pena máxima. Ahí fue cuando Roger tomó el balón y, desde los 11 pasos, engañó a Attinella para que se lanzara a la derecha, anotando con un tiro al centro. Al 45’+1, América lo ganaba.
Si América fue superior en el primer tiempo, Portland Timbers no quiso quedarse atrás y mostró una cara más agresiva. Dairon Asprilla casi coloca la igualdad en el electrónico (49’), luego de adentrarse al área por el sector izquierdo de la cancha, batallar para quitarse a tres defensas azulcremas y rematar bombeado en una jugada que, de no ser por el travesaño, habría entrado en la meta de Guillermo Ochoa.
Los ánimos se calentaron al 53’, luego de que Bravo, en un claro acto de frustración, pateó el balón sobre Fidalgo, todo tras cometerle una falta. Un conato de bronca sucedió por unos instantes, hasta que el árbitro puso orden en el césped y le mostró un cartón preventivo al argentino.
Mientras América mantenía el resultado, Portland amenazaba con colocar el gol. Dentro del área, Yimmi Chará remató con la zurda con potencia, pero le falló la dirección y no logró anotarle a Memo Ochoa. Sin embargo, pasaban los minutos y la situación se le complicaba a los Timbers, que incluso tuvieron que sacar en camilla a Christian Paredes, quien se torció el tobillo, dándole su lugar a Renzo Zambrano.
América, con la presión sobre sus hombros, resistía y trataba de mantener el resultado favorable. Todavía Paco Memo tuvo que sacar las papas del fuego y logró atajarle un tiro a Asprilla, el cual parecía tener etiqueta de gol.
El partido se le complicó al América justo en el añadido, cuando una mano le permitió a los Timbers igualar el encuentro: Felipe Mora lo hizo efectivo (90’+7) y le dio vida a Portland en esta llave.