La fiebre del futbol en México data de muchos años, porque se trata de un deporte que levanta pasiones, las escenas de jugadores mexicanos y de aficionados cada Mundial abundan la memoria de miles de personas.
Y ahora que el Mundial de Qatar está tan cerca, se presentó el libro De futbol somos, una antología de crónicas que muestra escenas, crónicas y estampas de México en los Mundiales y los Mundiales en México, país que ya ha sido sede de dos Copas del Mundo (1970 y 1986), de Ediciones cal y arena, una obra coordinada por Mauricio García García y Alfonso Pérez Gay.
Uno de los colaboradores es Rafael Pérez Gay, con un texto llamado El coleccionista, y quien dio su punto de vista del libro.
“En algún momento decidimos hacer un libro de futbol, porque somos obsesos del futbol, es un trabajo que me entusiasma, es un trabajo de los más jóvenes de la editorial. Soy un viejo aficionado al futbol y que cree que las sociedades necesitan de sueños colectivos, sin ellos no pueden avanzar y uno de esos sueños es el futbol. En las casas se enseña el futbol y por eso el aficionado nace desde la infancia”.
Por su parte, Luis Muñoz, autor de La épica y el arrojo, apuntó que “el libro es profundamente entretenido, escogieron autores que disfrutan el futbol y lo vuelven parte de un relato” y se querrá volver y volver a los diferentes relatos que tienen múltiples enfoques, porque es un libro que apela a las memorias y apunta que “el futbol en el gran público es un entretenimiento fantástico” y en la sociedad mexicana se ha metido en la memoria colectiva”.
Asimismo, en el libro se cuenta con un gran acervo fotográfico en el que hay muchos pedazos de historia del futbol en México y en las Copas del Mundo y que ayudarán al lector a conocer el futbol de antaño.
Mientras, Guillermo Fadanelli señaló que “saber de futbol es una generalidad, el juego no es solo para los expertos, el juego es una actividad humana propia de la naturaleza” y reflexionó sobre el sentido plano y llano “el futbol es un juego”, desde el sentido más lúdico, dijo que la obra es una convergencia de escritores de gran calidad con una gran diversidad de voces.
Finalmente, Arturo Pérez Gay, resumió que el libro contiene “crónicas personales en las que los autores depositan sus frustraciones en una Selección que no corresponde al nivel de afición que hay en el país”.
MGC