Los excesos de confianza le costaron el triunfo a Pumas. Pese a que tenían superioridad numérica, los universitarios no pudieron capitalizar sus ventajas y permitieron que FC Juárez les igualara 1-1, que antes del descanso ya peleaba en la cancha con nueve jugadores.
En una oportunidad desaprovechada para subirse a la cima de la clasificación, Universidad anotó y de ahí no volvió a dar señales, ante unos Bravos que aprovecharon a un rival apaciguado para repartir puntos. Pumas, que podía cerrar la tercera fecha en el primer lugar, está en el cuarto peldaño.
FC Juárez se puso en desventaja numérica de forma muy temprana. Eryc Castillo se fue sobre el costado derecho de Jesús Rivas con una fuerte barrida, acción que fue sancionada en primera instancia por una tarjeta amarilla. Sin embargo, Oscar Macías Romo acudió a revisar en el VAR y después de tres minutos de revisión, cambió la tarjeta y dejó a Bravos con 10 en la cancha.
Pumas, motivado por la expulsión, movió filas al frente y quiso capitalizar su ventaja. En la jugada posterior a la expulsión, Jerónimo Rodríguez se aproximó al área y probó suerte con un potente disparo que terminó pegando en el poste izquierdo de Iván Vázquez Mellado.
Momentos después, Carlos Gutiérrez le mandó un centro a Carlos González, quien conectó de palomita directo a las manos de Vázquez Mellado. Dos oportunidades peligrosas de Universidad para irse al frente del marcador.
De poco a poco, los dirigidos de Andrés Lillini pusieron contra las cuerdas a los hombres de Gabriel Caballero. Con Gutiérrez y Rivas, Pumas intentó atacar por la banda derecha, con centros peligrosos para González y Juan Dinenno.
Sin embargo, el conjunto local no podía capitalizar su superioridad numérica. Al minuto 21, Favio Álvarez siguió arrastrando su paso irregular por el torneo y cobró de forma errática un tiro de esquina que, si bien Jerónimo pudo recuperar, no se encontraba en posición cómoda para mandar un buen centro.
Precisamente el joven volante fue el que comenzó a tomar más protagonismo a la cancha. Antes de la media hora de juego, llegó por la izquierda y le pasó la pelota a Johan Vásquez, quien desde fuera del área disparó con fuerza, pero el balón terminó yéndose por encima de la meta fronteriza.
A los 34 minutos, Jerónimo volvió a aprovecharse de la herida en la banda izquierda al adentrarse en territorio rival y mandarle un centro a Dinenno, quien mandó un remate desviado que ya se cantaba como el primer gol de la tarde.
Un segundo expulsado de Bravos apareció a cinco minutos del descanso. Javier Nevares tuvo una llegada sobre Carlos Gutiérrez y, tras una revisión en el VAR, Macías confirmó la tarjeta roja para el lateral.
Para el segundo tiempo, Pumas mantuvo el buen paso hacia enfrente, buscando el ansiado gol que les permitiera capitalizar su ventaja numérica. La recompensa llegó en el minuto 51, cuando en una salida, Vázquez Mellado terminó llevándose a Carlos González. Desde los 11 pasos, el paraguayo clava el esférico en las redes y puso el primer tanto para los suyos (54’).
A los 54 minutos, Juan Iturbe -que había entrado de cambio en esta mitad por Jesús Rivas-, trató de duplicar la ventaja con un cañonazo demasiado elevado. A partir de ese momento, Universidad bajó las revoluciones y no se mostró tan agresivo a la ofensiva.
Su relajación les costó el empate. En el minuto 65, Maximiliano Olivera aprovechó el balón parado y conectó un potente disparo que se clavó en el ángulo, ante un Alfredo Talavera que no llegó ni a arañar la redonda. Incrédulos, Pumas entregó el 1-1.
Conforme pasaban los minutos, los jugadores universitarios se desesperaban más. Luis Quintana e Iturbe cometían faltas (esta última sancionada con tarjeta amarilla, por un pisotón), mientras que Jerónimo trató de recuperar la cima del marcador con un rifle que pegó en la barrera fronteriza.
Diez minutos antes de la conclusión, Olivera estuvo cerca de repetir la dosis, en una jugada similar, que puso de nervios a los auriazules. En los últimos instantes, parecía incluso que los fronterizos no tenían dos hombres menos, ante unos rivales que se encerraban en su área y jugaban a retrasar la pelota.
En la recta final, un penal estuvo cerca de salvar a Universidad, pero tras una revisión en el VAR, se optó por no otorgar la pena máxima, para desgracia del equipo local.
El partido terminó con un 1-1 que, si bien mantiene las condiciones invictas de ambas escuadras, dejó un sabor amargo en Pumas por dejar ir la oportunidad de llevarse el liderato en esta jornada, mientras que a Juárez le sirvió de escarmiento por las faltas cometidas que los dejaron al borde de la derrota.