El Atlético la Paz y los Correcaminos de la UAT demostraron la noche de este viernes estar muy lejos de ser, al menos en el arranque del Clausura 2025, equipos competitivos en la Liga de Expansión. Sin argumentos, ni profundidad, repartieron puntos al igualar a un gol en duelo de la jornada 3 celebrado en el Estadio Guaycura.
Un partido presenciado por cerca de 2 mil 500 aficionados que prometía luego de las anotaciones en la parte inicial, pero se cayó dramáticamente en lo técnico, lo táctico e incluso la lucha y entrega.
El primer intento serio del cuadro local se generó en el minuto 4. A los uruguayos Joaquín Pereyra y Juan Capeluto les ganaron muy fácil las espaldas en un servicio filtrado por Alam Galindo a Jorge Ferrer. El español explotó su velocidad, al momento de entrar al área y al tratar de checar el espacio Rubén Castellanos, la bombeó para abrir el marcador.
Las acciones más importantes de los naranjas, con un pobre futbol, surgieron producto de una pelota parada. Primero al 26 en un tiro libre cerca del área cobrado por Erick Espinoza bien atajado por Pedro Aguilar, pero dos minutos más tarde, en otra infracción pero metros atrás, Omar Rosas recentró a la posición de Gerardo Moreno y pateó de derecha para la igualada.
Lo que parecía un vendaval de los paceros sobre el arco rival tras su anotación, la igualada logró calmar los ímpetus y dio tranquilidad al cuadro dirigido por el uruguayo Héctor Hugo Eugui, aunque antes del descanso perdieron por lesión a Gerardo, al presentar molestias en su pierna derecha. Sergio Treviño entró en su sitio para la segunda parte.
El segundo tiempo fue uno de los más grises hasta el momento dentro de la categoría. Cada escuadra demostró sus deficiencias en lugar de virtudes, careciendo de verdaderas jugadas de sobresalto en las porterías.
El equipo de Raúl Rico, en teoría con mayor plantel decidió meter a elementos con mayor profundidad y experiencia, caso Elías Hernández, poco fructificaron en el terreno de juego. Solamente destellos individuales de Josué Arana y Jorge Yáñez, aunque nunca encontraron colocarle un balón a modo a Ferrer.
Del lado tamaulipeco, Eugui reacomodó algunos jugadores de arranque que intentaron hacer cosas distintas y sin éxito. A la recta final y con la paridad como un buen negocio, decidió echar el equipo a su propia cancha y sacó provecho de la debilidad ofensiva del cuadro de Baja California Sur.
Merecido empate para dos equipos que propusieron muy poco. Los universitarios regresan para alistar el Clásico Tamaulipeco, el próximo jueves, al recibir a la Jaiba Brava del Tampico-Madero.