El héroe del boxeo mexicano, Marco Verde arribó a México luego de colgarse la medalla de plata en París 2024; por supuesto, su llegada a la terminal 2 del aeropuerto de la Ciudad de México, causó revuelo, aficionados pidiendo autógrafos, exclamándolo, y su familia esperándolo con los brazos abiertos.
“Muy contento de volver a casa, la verdad es que decía: ‘no quiero volver, va a ser un caos’, desde que estaba en París sentía el apoyo de todo México en las peleas, me sentía como en casa. No pude conseguir la medalla de oro, me quedé con esa espinita de no poder conseguirla, pero en cada pelea di todo de mí”.
Para Marco el fruto de muchos años de trabajo, 12 para ser exactos, tuvo resultados y es por ello que describió el momento en el que recibió su medalla olímpica.
“Después de tantos años de trabajo, es lo único que pensaba cuando estaba en el podio que lo había logrado, ya 12 años con esa mentalidad de ir a Juegos Olímpicos y lograr una medalla y al momento de que me pusieron la medalla se me vinieron a la mente tantos sacrificios, no estar con la familia, por eso lo disfruté bastante”.
El pugilista originario de Mazatlán, Sinaloa, no se precipita y asegura que por ahora piensa dejar un poco el boxeo y enfocarse de lleno a su carrera universitaria antes de tomar una decisión de si entrar o no al profesionalismo.
“Actualmente estoy estudiando creo que también tengo que darle un tiempo a la universidad, descansar un poco del box, pero igual mantenerme activo y pensar bien las cosas”.
Por ahora faltan cuatro años para el siguiente ciclo olímpico que será en Los Ángeles 2028 y hasta ahora el boxeo se mantiene en suspenso; sin embargo, Marco es optimista y aseguró que se mantendrá como disciplina olímpica.
“Si he escuchado que lo quieren sacar, pero yo creo que no, yo tengo fe en que no lo van a sacar. En Los Ángeles yo siento que todavía va a estar el boxeo”, recalcó.
MGC