Tigres vuelve a una semifinal después de dos torneos de no conseguirlo, y Rayados, quien fue líder de la clasificación, medirá sus fuerzas en el Clásico Regio 130, encuentro por el que muchos aficionados armarán una gran fiesta, pese a ser miércoles.
Entre canticos, pasión y un enorme amor por los colores los "incomparables" se preparan para apoyar a su equipo en el Estadio Universitario, donde ambos clubes dejarán todo en la cancha para acercarse una vez más al campeonato.
Cristian Juárez y su sobrino César son dos aficionados que apoyan a los Tigres, dejando todo su amor en la tribuna. Ellos pertenecen al grupo llamado La Pre(B)ia, que en cada partido de local se reúne desde horas antes para así irse en conjunto al "Volcán".
Conviven sanamente, comparten de algunas cervezas y como es tradición en Monterrey no falta la carnita asada.
Esta tradición surge en el barrio de Lomas de Anáhuac, en San Nicolás de los Garza, donde cuatro vecinos se juntaban antes de ver los partidos. Poco a poco comenzaron a convocar a más seguidores del Club Tigres y fueron creciendo cada vez más. Ahora son 50 miembros activos.
“El sentimiento que provoca asistir es muy grato, ya que convives y compartes la pasión con gente que la siente y la vive igual que tú, donde el tema de conversación puede ser de 3 a 4 horas antes de cada partido y se disfruta la plática como si hubiera sido de un minuto”, mencionó Cristian.
Rulo Simental fue el iniciador de este apasionado grupo de hinchas, aunque ya falleció, dejó esta bonita tradición que ya tiene 20 años donde alentan a los Tigres y le dan la bienvenida a quien tenga la intención de apoyar y seguir incondicionalmente al equipo.
Su forma de vivir el partido es muy peculiar. Asisten a las zonas norte y de gol en el estadio Universitario, y mientras los demás aficionados disfrutan del partido sentados ellos lo viven de pie y al filo de la butaca.
“Yo asisto con mi tío Cristian, sus amigos y algunos amigos míos, para mí cada vez que voy es una experiencia nueva porque siento que se vive diferente. No es lo mismo ir a un partido sin asistir antes a la Pre(B)ia, el sentimiento es diferente”, contó César.
Así es como Cristian y César dos aficionados que aparte de compartir el amor por los colores, comparten el amor de familia.
XP