A hombros Mauricio y oreja a Rivera

Interesante tarde de toreros sin rodillazos ni giros. Los toreros mostraron seriedad y respeto ante sus toros.

Dos orejas para el matador José Mauricio con el último toro de la tarde (Jorge Matchain)
Salida a hombros del matador José Mauricio (Jorge Matchain)
Octavio X. Lagunes
Ciudad de México /

Bajo la entrada.. Javier Fandila El Fandi, quien en los mentideros taurinos se dijo que suplió a Emilio de Justo; el potosino Fermín Rivera y la reaparición de José Mauricio con toros del encaste Atanasio de Barralva criados por la familia Álvarez.

Juego del ganado. 1o áspero y complicado 2º se frenaba y se derrumbaba 3º noble y fijo 4º se revolvía muy pronto 5º repetitivo que embistió a media altura 6 º complicado que pegó medias embestidas.

El Fandi tuvo una tarde con disposición sin fortuna, pese a que banderilleó a sus dos. Con el que abrió plaza no pudo comunicar, le dio por pinchar. Ante su segundo también salió muy dispuesto, ante un toro que saltó al callejón y lesionó a una persona; logró un buen segundo par. De muleta su toro fue muy complicado y poco pudo lucir. La gente volvió a meterse contra él. Mató con otro espadazo caído. En los dos se retiró entre rechifla.

Fermín Rivera salió con valor sereno y gracias a su voluntad le encontró el punto dócil del no peligroso pero sí complicado toro. Desafortunadamente lo pinchó antes de una estocada efectiva. Fue llamado por el público a saludar en el tercio. Ante el quinto, Fermín realizó una faena personalizada donde se vio solvente y poderoso al entender a este otro toro. No se salió de su toreo y mató con certeza. Cortó una merecida oreja.

José Mauricio lució de capa por sus detalles de expresividad y fijeza. Con la muleta realizó una faena mágica, con personalidad y carácter. Transmitió a toda la plaza llenando de arte el ruedo de esta Monumental. Desafortunadamente pinchó hasta matar de una entera caída. Dio una merecida vuelta al ruedo. Ante el que cerró sacó la casta y le plantó cara realizando un toreo por la cara a un complicado toro echando toda carne y el cuerpo. al asador. Mató de una entera salvándose de un percance mayor. Le llegó a la gente y cortó dos orejas bajo el clamor popular.


ZZM

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