Cayó de pie Borja Jiménez en esta plaza, mostrando el sitio que trae y Miguel Aguilar quedó a deber, ante las exigencias del diverso encierro de San Constantino.
Ganado con casta y complicaciones propias de los toros de lidia. Nuestro público está acostumbrado a que el toro bueno es el toro dúctil, y le cuesta trabajo entender las complicaciones propias de un toro bravo.
Toros de San Constantino criados en Jalisco por Juan Pablo Corona. Parejos en presentación, a excepción del que cerró plaza, que no gustó por lo paliabierto. Juego del ganado: 1° Fijo que metió la cabeza. Mereció justo arrastre lento. 2º sin transmisión. 3º poco emotivo 4º se acabó entregando. 5º también bravo con raza. 6° pitado por paliabierto que metió la cabeza.
Confirmación de alternativa de Borja Jiménez vestido de blanco y oro con cabos en negro, ante “Triunfador” #681 con 518 kg. a bordo. Un toro que exigía un valiente y Borja le plantó cara. Muletazos a la mínima distancia pudiéndole a un toro exigente que nunca se entregó a pesar de lo reacio del toro. Se le embalaron los estoques pinchando en demasía, escuchó un aviso y mató de una entera que hizo guardia. El toro dobló y solo quedó su gallarda entrega. Saludó en el tercio. También, su banderillero Christian Aparicio, hizo lo propio en su turno. Ante el quinto, la cuadrilla de Borja tuvo una penosa actitud al no poder ni querer poner el tercer par cuando el Juez lo exigía. Vaya desvergüenza e incapacidad. Borja volvió a mostrarse dominador y solvente ante otro toro que le exigía quietud y aguante. Se le ve el sitio que trae este hispano cayendo de pie en esta plaza. Media estocada trasera aguantando. Mató hasta al cuarto descabello. Aviso. Perdió el triunfo que ya lo tenía en las manos en cada uno de sus toros. Merecida vuelta al ruedo
El padrino, el tlaxcalteca Sergio Flores vestido de morado y pasamanería negra, se la jugó en la lidia del primero, aguantando con voluntad y sitio y les pudo a las embestidas del remiso. Mató de media tendida y un descabello. Ante el cuarto, con la muleta, Sergio se volvió a mostrar con voluntad y perseverancia, aunque no con abundante clase ni reposo. Cierra con sus típicas manoletinas. Media tendida en buen sitio. Leve petición de oreja que fue concedida. Oreja protestada.
El hidrocálido testigo Miguel Aguilar, ataviado de grana y oro. Ante su primero, poco pudo hacer ante un toro que nunca se entregó ni quiso humillar. Mató como pudo y hasta escuchó un aviso. Ante el que cerró plaza, un toro paliabierto que no gustó al tendido, Miguel lo recibió de rodillas en el centro del ruedo para pegarle una tanda completa de derechazos. Ya de pie el toro planeó en las embestidas calamocheando. Miguel se perdió entre tantos muletazos que dio. Muchos sin ton ni son. Entera desprendida y se retiró en silencio, antes de escuchar un aviso.
La semana que entra se anuncia la esperada presentación del sevillano Juan Ortega acompañado del hidrocálido Juan Pablo Sánchez y el oriundo de Irapuato, Diego Silveti, con toros de Montecristo. Les recomiendo que no se la pierdan.
ZZM