La pandemia no ha sido nada sencilla para nadie. A su manera, las personas han tenido que adaptarse para tratar de llevar su vida lo más normal posible, tal y como es el caso de Éder Sánchez, el marchista mexicano que ha tenido mucho que restringirse en sus entrenamientos, pero que la práctica sin competencia lo hace correr el riesgo de lesionarse.
“Por mi parte estoy empleando un poco de mi tiempo para emprender mi negocio, y para entrenar. Digamos que estoy un 50-50, pero todo va marchando excelente y muy motivado. Si se da Tokio, que bueno y si no, sigue Francia”, comentó el atleta de 34 años en entrevista con MILENIO-La Afición.
Por lo pronto, tus esfuerzos están divididos en su carrera atlética y en sus empresas en e-commerce, en las que se dedica a las importaciones y exportaciones a través de Amazon. Es precisamente esta actividad la que le permite costearle su trayectoria deportiva desde hace dos años, cuando le cortaron su beca del FODEPAR.
“En el 2018, tuve una operación, una operación bastante considerable, tuve un sangrado intestinal, durante un periodo como de 6 meses y los doctores no daban, entonces me operan; y el metodólogo que está en FODEPAR actualmente, pues me dice que ya no sirvo como atleta, porque no clasifiqué a los Panamericanos de Lima, y me quitan todo apoyo, me quitan la beca. Entonces, es cuando decido emprender un negocio y hasta la fecha es el que me sigue manteniendo activo en el deporte”, compartió Éder.
Desde entonces, la recuperación ha sido complicada, con pérdidas de hasta tres litros de sangre, los cuales fue recuperando en la operación, pero el daño intestinal y todas las afectaciones propias del deporte que practica, han sido todo un progreso.
“Actualmente ya estoy totalmente bien, ya puedo entrenar, pero con esa desconfianza de que no me vuelva a pasar, porque si me vuelve a pasar una situación así, voy a tener que retirarme”, dijo Sánchez con una clara semblante preocupada.
Por lo pronto, lo ideal sería pensar en los Juegos Olímpicos de Tokio, los cuales se llevarán a cabo el próximo año. Sin embargo, mucho de esto dependerá de factores externos, como los anuncios que haga la Federación Mexicana de Atletismo en lo que a competencias y selectivos habrá para la próxima justa veraniega.
“Ahorita los mexicanos tenemos prohibido viajar hacia Europa a competir, debido al tema de la contingencia, pero esperemos que en México nos puedan realizar un selectivo para poder clasificar a estos Juegos Olímpicos; sino de otra manera, nadie podría ir a estos juegos”, explicó.
Éder, al igual que muchos otros atletas, está consciente de que las condiciones sanitarias podrían no ser las adecuadas para que se desarrollen los Juegos Olímpicos y al Comité Olímpico Internacional no le quede de otra más que cancelar definitivamente el evento en Tokio, sin mencionar que la Federación les exige por lo menos tres competencias internacionales para poder dar el tiempo y meterse dentro de los 60 mejores del mundo.
“Si nosotros competimos en condiciones de altitud o de calor, no vamos a dar el tiempo. Necesitamos que sea clima fresco, nivel del mar; condiciones como las que tienen países como Alemania, Polonia, España; este tipo de países si puede darse ese tipo de marca, de una hora veintiún minutos, para abajo, que es lo que está pidiendo la Federación Internacional”, señaló. “México lo veo muy difícil que se pueda lograr este tipo de marcas, porque no tenemos las condiciones, la altura nos va a pega; y no se va a lograr”.
Incluso es consciente de que calificar a esta edición dependerá de si está recuperado, por lo que París no suena a algo descabellado, pese a que tendría 38 años para ese entonces. Competencias como el Campeonato Mundial de 2022 en Oregón parten como escenarios para que él pueda recuperarse y aspirar a un boleto olímpico en la capital francesa.
“Honestamente, para Tokio es difícil llegar. Yo me veo más preparado para París 2024, que para Tokio. Si nos dicen que el selectivo es un mes antes de Olímpicos, va a ser muy difícil estar en forma. Porque, en primer, lugar no vamos a tener las tres competencias que se nos exige; y segundo, en otra competencia no la vamos a dar. Necesitamos más opciones y competir más veces”.