Jon Rahm rompió la maldición en México, luego de 11 meses sin una victoria – a pesar de las oportunidades – el jugador español logró conquistar la primera edición del Mexico Open at Vidanta en Puerto Vallarta con un golpe de diferencia.
El número dos del mundo, quien esta semana habló de reconquistar la cima del golf, aseguró que esta victoria - aún cuando su golf no estuvo perfecto – fue fundamental para iniciar el camino de reconquista del número uno mundial.
“Esta victoria es un gran primer paso, un gran salto adelante en ese sentido. Antes me había posicionado bien, pero sin victorias, pero esto ayuda a volver a ese camino de jugar bien y tener la oportunidad de ganar los domingos los torneos. En un día como hoy esta lucha me da mucha confianza y muchas ganas de seguir... Para llegar a ese número uno (de nuevo) voy a tener que ganar y seguir ganando torneos grandess como este. Así que me alegra ver conseguido esta victoria tan rápido”, dijo en entrevista posterior a la última ronda en la grama del Vidanta en donde firmó una tarjeta final de 267 golpes, 17 bajo par de campo.
La última ocasión en la que Jon se llevó un triunfo fue en el Abierto de Estados Unidos y ahora con la victoria en el Abierto Mexicano es uno de los pocos peleadores que tiene una colección de campeonatos nacionales, pues también ha levantado los trofeos en Irlanda y España.
“Creo que eso es más una coincidencia, la verdad es que no pienso en los campeonatos nacionales. El título del torneo la verdad es que no dice mucho, es más el lugar y lo que representa el torneo “, abundó.
El jugador europeo se llevó este triunfo gracias a una ronda conservadora, pues hoy las condiciones climaticas no permitieron ser muy agresivos por el viento. “Rahmbo” embocó birdies en las banderas 6, 7 y 14por un bogey en el 10 para una ronda de 69, dos por abajo de par.
Aún así, conservó la distancia a pesar de la presión de jugadores como los estadounidenses Tony Finau, Kurt Kitayama y Brandon Wu, quienes se quedarón solo a un golpe.
Un sabor agridulce.
Para los representantes tricolores la primera edición del Mexico Open no fue lo que habían proyectado, pero hay un balance positivo.
Abraham Ancer y Alvaro Ortiz quedaron empatados en la posición 42 de la tabla y como los mejores mexicanos con un score de seis golpes bajo par, a 11 del campeón Rahm.
“No fue como me lo había imaginado, yo quería una mejor posición, pero fue una semana complicada. Lo bueno es que deje de sentir molestia en la espalda después de esa pequeña lesión. Ahora me siento al 100 por ciento y listo para seguir adelante con la temporada”, dijo en entrevista Ancer quien tuvo una última ronda de 70 golpes.
Alvaro, jugador del Korn Ferry Tour y quien recibió una exención, a pesar del desplome que tuvo luego de un triple bogey en el cierre de la penúltima jornada, aseguró que este torneo le deja una gran enseñanza y experiencia para el futuro.
“Como cualquier otro torneo suma a la experiencia. Y poder hacerlo durante los cuatro días me llena de confianza para la temporada. Entre más tenga experiencias”, declaró.
Por su parte, Carlos Ortiz el segundo mejor mexicano clasificado a nivel mundial en el Ranking Mundial de Golf cerró en el lugar 51 con una foja de 279 golpes, cinco bajo par de campo.
Se pone en la plática
Para Jon Rahm ser un buen representante del deporte español es algo muy importante y que espera que cuando su carrera llegue a una conclusión pueda ser catalogado dentro de los mejores deportistas.
“Me he dado la posibilidad con lo que he hecho en mi carrera de ser uno de los grandes deportistas que ha dado España. La verdad que llegar al nivel de Rafa Nadal, Paul Gasol, de muchos de los futbolistas y de Carlos Sainz padre o hijo va a ser muy complicado. Danny Pedroza también. Hay tantos deportistas que han conseguido grandes cosas. Medallas olímpicas y así. Tantos hechos que es complicado verme tan arriba en la lista pero me seguiré dando la oportunidad y si sigo jugando al mismo nivel, de estar dentro de los 10 mejores", dijo.