Citlalli Ramírez es una persona que inspira, ya que no solo es bombera, sino que también es madre soltera y atleta, tres pasiones que sabe combinar y compaginar a la perfección; y en esta ocasión, la deportista corrió por primera vez el Maratón de la Ciudad de México con su equipo de bombero.
La deportista ya cuenta con 17 años de servicio en el Heroico Cuerpo de Bomberos, una profesión que eligió gracias a su padre, quien también ejerció durante tres décadas.
“Yo crecí escuchando sus experiencias, todas las anécdotas que vivía como bombero. Desgraciadamente la situación económica que se vivía en casa me lleva a tener la necesidad trabajar y mi opción fue entrar a una estación de bombero”, declaró Citlalli para MILENIO – La Afición.
Su inicio en esta profesión no fue sencillo, ya que en aquel entonces se vivía machismo en la institución, pues fue parte de la primera generación de mujeres operativas en 2006, la cual estaba conformada por 20 personas, pero poco a poco fueron demostrando que “tal vez la fuerza no era la misma, pero nuestras capacidades eran muy buenas y teníamos ciertas cualidades que los hombres no tenían, fuimos demostrando año con año que una mujer puede sobresalir, puede desempeñar un servicio de emergencia, puede cubrirlo y actualmente ya tenemos la primera mujer que se va a hacer cargo de una estación de bomberos”.
Es notorio el orgullo que siente Citlalli por ser parte del Heroico Cuerpo de Bomberos, pues desde que llegó a este lugar supo que era el sitio indicado, ya que solo basta una mirada de agradecimiento, el aplauso de un niño para sentirse llena, debido a que “es un trabajo altruista”.
“Para mí representar el Heroico Cuerpo de Bomberos ha sido desde el día uno hasta hoy. que tengo ya 17 años de servicio. es tratar de dejar algo bueno y una huella. Lo he tratado de hacer, tengo especialidades, tengo varias capacitaciones, compito en carrera vertical, he tenido el récord nacional en carrera vertical en la categoría bombero y también reto a nivel Latinoamérica con el mejor tiempo femenil, siempre he tratado de dejar huella en mi trabajo, en mis servicios de emergencia pero también algo que deje historia en la institución”.
Entre risas recuerda su primer llamado de emergencia que fue un incendio, el cual describe como “chusco”: “Obviamente los nervios te invaden, es tu primera emergencia, el tenerte que equipar en 30 segundos era un reto increíble para mí, y llegar a un servicio y ya ver el fuego, el momento en el que me dan la línea de manguera, pues obviamente la fuerza, la presión que tenía esta línea me revuelca, fue un servicio muy chusco. Lo recuerdo con mucho gusto y actualmente, que bueno ya sé las técnicas y todo lo que se implementa en este tipo de emergencias, me causa mucho asombro”.
Pero así como rememora con diversión su primera experiencia, también ha vivido momentos complicados como el rescate de una mujer que quedó prensada en un vehículo de gran tamaño; “su vida estaba latente a minutos y ella entró en shock”, por lo que no quería que ningún hombre la tocara, solo pedía que una mujer lo hiciera o que nadie la moviera, “en ese momento me toca hacer la extracción de la persona, la estabilización para poderla trasladar a un servicio de emergencia y que la persona no perdiera la vida”. Para la también atleta fue complicado porque tuvo que hacerlo sola, pero el “más satisfactorio porque demostré que una mujer puede hacer una emergencia, cubrirla y sola”.
Madre, atleta y bombera
Una vez que Citlalli deja el uniforme es una mujer totalmente entregada a sus tres hijos, ella es madre soltera, bombera y además atleta, y eso no impide darle el tiempo a sus tres grandes pasiones, pero ante todo siempre estarán primero sus pequeños.
“Soy una mamá común y corriente, simplemente llego desvelada, entonces es un poquito más difícil porque cubro ese rol que adoro a mis hijos, que son mi mayor inspiración; sin embargo también la condición del sueño, trabajo 24 horas, eso influye un poquito, aunado a que también entreno alto rendimiento, entonces he aprendido a que mis 24 horas las pueda distribuir de una forma de la cual no descuide lo principal que es mi familia, en lo que me apasiona que es mi trabajo y aun así el deporte, que es lo que más amo”.
¿Cuándo comenzó a correr con el uniforme de bombero?
La pasión por correr siempre ha sido parte de ella, pero fue hace cuatro años cuando decidió involucrarse en el mundo de las carreras; aunque en un inicio lo hacía “como por mantenimiento”, fue en 2019 cuando decide usar el equipo de bombera para apoyar a una fundación de niños con cáncer “y de ahí empiezo a participar en más carreras, llevo cinco Medios Maratones con equipo de bombero y este fue mi primer Maratón con equipo de bombero”.
El traje que Citlalli Ramírez ocupa en las carreras inicia pesando nueve kilos (pantalón, chaquetón y casco), pero una vez que concluye termina alrededor de los 12 kilos.
“Yo no corro con la bota, corro con tenis, únicamente pantalón, chaquetón y mi casco, pero en el transcurso de la carrera voy sudando y también me voy mojando el cuerpo para tratar de enfriar un poco la temperatura, entonces termina pesando aproximadamente 12 kilogramos en un Medio Maratón”.
Para la atleta no hay días de descanso y es que entrena todos los días, dos horas de carrera y una de funcional en las noches: “me preparo todo el año, desde enero pongo mis objetivos tanto de competencia como de las carreras que tengo planeadas hacer, y todo el año me preparo para el reto que se me presente”.
El único límite se lo ponen las personas
Citlalli tiene aún muchas metas por cumplir, pero por el hecho de ser mamá ha dejado un poco de lado el tema profesional, pues como nos lo hizo ver en diversas ocasiones, sus hijos son lo más importante, pero espera poder conseguir sus objetivos.
“Dejar historia como mujer en una institución siempre estigmatizada para hombres sería muy importante, pero mi prioridad siempre han sido mis hijos y he limitado un poco esa parte en cuestión de desarrollo profesional, llegar a ser jefa de una estación o tal vez tener una dirección en la institución sería un logro para mí”.
Citlalli Ramírez mandó un mensaje de empoderamiento para todas las personas que tienen sueños por cumplir, dando dos factores muy importantes para lograrlos y dejando ver que el único limitante se lo ponen las personas.
“Todo lo que nos propongamos si se trabaja con disciplina y constancia se va a lograr, los sueños y los objetivos se plantean y yo creo que no hay nada mejor para llevarlos a cabo que la constancia y la disciplina. No tenemos límites, el único límite que tenemos nos lo vamos a poner nosotros”.
ZZM