Mejoró la entrada en tarde nublada. Novillos de San Martín criados en Tequisquiapan, Querétaro, por los herederos de Don Alberto Bailleres. Buenos novillos bien criados, que en general dieron buen juego: 1º Muy bajito, se dejó. Aplaudido en el arrastre. 2º También bajito con buen tranco y nobleza. 3º Noble por ambos lados. Ovacionado en el arrastre. 4° Poco emotivo. Sin transmisión. 5º Noble que iba de largo. 6º Complicado que se vencía por ambos lados.
Abrió plaza el capitalino José María Mendoza, de tabaco y plata vieja. Buena vara precisa y discreta. Buen quite con ajustadas chicuelinas. Inició con la muleta con toreros doblones rodilla en tierra a un novillo que solo pasaba por la derecha y lo obligó a pasar por la izquierda. Entera tendida que fue suficiente. Ligera petición acertadamente no concedida por sus altibajos con la muleta. Aplausos en el arrastre. Saludó en los medios.
Ante su segundo. Un novillo más alto y un tanto escurrido de carnes, José María realizó un quite por zapopinas con poca fijeza de pies. Con la muleta el novillo se pegó al piso y poco pudo hacer su matador, por más voluntad que le puso Mendoza. Alargó en demasía su faena con la desaprobación popular. Fatal con las espadas larga y corta, incluyendo un penoso bajonazo que hizo guardia. Silencio. Escuchó dos avisos.
El segundo espada, el tlaxcalteca Jesús Sosa, ataviado de grana y oro, lanceó de capa con personalidad y originalidad. Sabe mover bien los brazos. Fue feamente prendido el menor de los hermanos Angelino, Gerardo, en banderillas y Sosa le brindó con sonora ovación. El novillo se quedaba corto por la derecha y por la izquierda Sosa no acabó por entenderlo. Bernadinas nada vistosas para cerrar su faena. Entera contraria desprendida que fue suficiente. Petición que fue rápidamente concedida, un tanto benévola. Ante el quinto, José se vio aseado con la capa con un quite por navarras replicando otra intervención de Axel. Brindó al ganadero Toño de Haro y con la muleta pegó algunos largos muletazos con poco temple y sin mando. Francos altibajos con la muleta cerrando con valientes manoletinas. Entera contraria tirándose con mucha decisión. Fatal con la espada corta. Dos avisos y se despidió entre división.
El tapatío Axel López de esmeralda y oro con cabos blancos, se vio variado y lucido con capote y banderillas. Con la sarga, se vio que es un novillero que le llega a la gente por su carisma y sus originales detalles de artista. Alargó demasiado su faena y cerró con una luquecinas untándose de toro. Dos pinchazos en lo alto y media caída atravesada que requirió descabello. Perdió la oreja por tanto fallo con el estoque. Con el que cerró plaza, Axel lo recibió en los medios con arrojo. En banderillas invitó a Sosa, quien se vio acertado, no tanto Axel, pero sí vistoso y con valor. Brindó a su apoderado el matador Alfredo Gutiérrez. Inició de rodillas pegado a tablas aguantando de verdad a su novillo. El novillo le pegaba ásperos derrotes y Axel le plantó cara y el novillo se puso peor, no entregándose. Le metió poderosos doblones antes de dos pinchazos por no dominar la suerte de matar. Entera a toma y daca quedando trasera y contraria. Par de descabellos. Escuchó un aviso.
Interesante temporada con muchos altibajos y malos estoqueadores, en un ruedo con el estribo al ras de la arena, lo que es peligroso y antirreglamentario. El auténtico triunfador de la temporada fue Bruno Aloi, que no pudo repetir. Acertadamente la Empresa cambió el horario de las novilladas para evitar la lluvia. Un desastroso Juez que comete más pifias que aciertos, porque desacreditó los arrastres lentos y abarató las orejas.
El 19 regresan las corridas de toros con una nocturna de las luces.
ZZM