No hay duda de que el golf mexicano se encuentra en un gran momento. Abraham Ancer es el duodécimo mejor golfista en la clasificación mundial, tras una temporada en la que tuvo su primera victoria en el Tour de la PGA – en el St. Jude Invitational – así como ocho torneos más en los que terminó dentro del Top 10, mientras que exponentes como Carlos Ortiz (67 del mundo) terminaron con la sequía varonil cuando ganó el Houston Open en noviembre de 2020, el primer triunfo para un mexicano en PGA desde 1978, año en el que Víctor Regalado conquistó el Ed McMahon-Jaycees Quad Cities Open.
El golf femenil ha recibido reflectores importantes a través de Gaby López y María Fassi: la primera, rankeada en el sitio 39 del Tour de la LPGA y abanderada de México en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, mientras que Fassi, lugar 115 del mundo, se recuperó de una lesión y dio una excelente actuación en la justa olímpica, al terminar en el peldaño 23, el mejor para una latinoamericana en tierras japonesas.
Estas buenas actuaciones no pasan desapercibidas. Lorena Ochoa, considerada por muchos como la mejor golfista que ha dado México, está contenta por sus colegas de deporte y amigos, a quienes felicita por la gran temporada y espera que sigan al más alto nivel.
“Lo más importante es que continúen, que hagan lo que están haciendo, porque eso les está dando buenos resultados. No deben desconcentrarse, deben trabajar mucho y que hagan las cosas de una manera seria y también responsable”, dijo la tapatía en entrevista con MILENIO-La Afición.
Para Ochoa, el momento que vive el golf es especial, incluso considera que son buenos ejemplos para los jóvenes que han iniciado en el deporte y buscan consagrarse en el profesionalismo, por lo que ver los éxitos cosechados puede ser ese impulso anímico que puede ayudar a que el progreso no se detenga.
“Lo importante es seguir, cada vez tenemos más apoyo del Gobierno, el hecho de que sea un deporte olímpico es importante, estos golfistas que hoy destacan tienen detrás de ellos muchos años jugando bien y entrenando mucho, creo que las nuevas generaciones podrán animarse, ponerse las pilas, soñar en convertirse en profesionales, llegar lejos y representar a México”, reflexionó.
A Ochoa le tocó ver a López y Fassi desde temprana edad, además de que Ortiz creció en Guadalajara igual que ella, por lo que sabe del talento con el que cuentan y su papel para que el golf nacional no deja de sorprender dentro y fuera del país.
“Soy su amiga, pero también los trato de seguir y estoy muy de cerca, tratando de ayudarlos en lo que pueda”, añadió la golfista, quien en 2007 se convirtió en la primera mexicana en conquistar un major en el Tour de la LPGA al ganar el Abierto Británico.
Ese mismo contacto y cercanía el que le permitió contar con todos ellos en el GOLF Charity Classic, un torneo benéfico que se llevará a cabo el 26 y 27 de noviembre en el Guadalajara Country Club y que servirá tanto para promocionar el golf mexicano, reconocer el trabajo de sus compatriotas y recaudar fondos tanto para la fundación del club sede y de la Fundación Lorena Ochoa.
“Cuando los busqué me dijeron inmediatamente que sí y me da mucha alegría contar con ellos. Sus resultados de este año han puesto el nombre de México en un lugar muy importante dentro de las mejores giras… valdrá mucho la pena ver a los mejores golfistas de nuestro país en un mismo lugar”.
La jalisciense también espera que toda esta camada de golfistas aproveche el gran momento en el que se encuentran y no dejen de involucrarse en ayudar a todos los que lo necesiten, al ser amigos talentosos y con un enorme sentido humano.
“Ojalá que cada año se puedan involucrar más en causas sociales en nuestro país, porque creo que es muy importante tener esa parte social, de sensibilidad y de ayudar. Me siento feliz de que me están ayudando en mi Fundación y tenemos muchos planes en el futuro, ojalá que este torneo sea el primero de muchos”.