El barco cargado de la ilusión de lo que prometía ser una gran tarde, toros navegaba sin control rumbo a encallarse, pero justo antes del naufragio, el recién alternativado Héctor Gutiérrez tomó el timón y dio un cambio drástico de rumbo que lo puso en el rumbo de cortar dos orejas y cosechar un triunfo rotundo que, a fuerza de ser sinceros, nadie esperaba.
Y es que la tarde de gran expectación comenzó a desmoronarse ante el patético juego de los astados de Villa Carmela, que en contraste a su buena lámina exhibieron una debilidad desesperante aunado a falta de clase y bravura. Una receta perfecta para el fracaso. La plaza registró la mejor entrada en lo que va de la mini temporada, principalmente ante el conjuro de la presentación del español Emilio de Justo, quien venía precedido de una temporada de ensueño en su patria.
Pero nadie contaba con que los preciosos toros de Villa Carmela, eran solamente eso, pura apariencia.
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Abrió la tarde Héctor Gutiérrez con el toro de su ceremonia de alternativa y ante cual se mostró solvente y sobrio, sin que le pesara la plaza, el cartel o su propio doctorado como nuevo matador de toros. Pero lo grande llegó con el sexto de la tarde, de nombre Don Pedro y ante el cual con el capote le pegó un escalofriante quite por saltilleras. Con la muleta se prodigó en pase con ambas manos y sobresalieron dos remates con sendos trincherazos, que le hubiera aplaudido el mismísimo Silverio Pérez, una faena de entrega, arte en inteligencia que coronó con una estocada que le valió el corte de dos orejas y un bondadoso premio de vuelta al toro.
Por su parte, Emilio de Justo dejó sus mejores momentos con verónicas a su primero y al séptimo que regaló. Cabe destacar su entrega y ganas de agradar en todo momento, pero nunca encontró colaboración de los astados.
Misma historia que vivió Diego Silveti, que sobre todo con su segundo, que se volvía pronto se la jugó, pero sin encontrar materia prima para destacar.
Ficha técnica
- Plaza de toros Nuevo Progreso. Tercera corrida de temporada
- Se lidiaron seis toros de Villa Carmela, que mostraron debilidad, salvo el sexto que mereció vuelta al sexto. Uno de Guanamé de regaló, de escaso juego.
- Emilio de Justo (verde bandera y oro) Palmas y palmas. Palmas en el de regalo.
- Diego Silveti (burdeos y oro) silencio y palmas.
- Héctor Gutiérrez (grana y oro) vuelta y dos orejas.
JMH