La emoción y los nervios tuvieron que esperar en el debut de la Selección Mexicana de Béisbol. Aunque se tenía presupuestado una ceremonia de inauguración en el Estadio de Charros para celebrar el Premier 12, la lluvia tenía otros planes. El segundo partido del torneo que entrega dos pases a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se vio claramente retrasado.
México y República Dominicana estaban listos para saltar al campo y buscar su primera victoria dentro del certamen, sobre todo después de saber que Estados Unidos le había pasado claramente por encima a Holanda. Pero su uniforme terminó por convertirse en una vestimenta habitual ante la lluvia que caía sobre el diamante.
El cielo nublado de las cuatro de la tarde contrastaba con el clima soleado que arropó el primer partido del certamen. Para las 5:30 pm, el agua paró de caer en el Estadio Charros, pero decidió volver minutos después. La inauguración se canceló esperando que el duelo entre mexicanos y dominicanos pudiera disputarse a tiempo.
Aunque la lluvia no era abrumadora, sí era constante. A las 7:00 pm aún había algunas lonas sobre el diamante, en los sitios donde se colocan las bases; también la lomita estaba cubierta. No pasó mucho tiempo para que los asistentes comenzaran a desesperarse y empezaran a silbar para exigir una explicación.
El sonido local anunció que tomaría una decisión, pero no cuándo lo haría. Para calmar las ansias, recomendaron mantener el boleto de entrada y la organización optó por mostrar el partido de los Charros de Jalisco y Tomateros de Culiacán en la pantalla del estadio.
La lluvia cesó, llegó la calma pero también los reclamos de los asistentes, que continuaban fieles en las gradas y pasillos del estadio. Minutos después de haber anunciado que tardarían 30 minutos en tomar una decisión, la organización decidió retirar las lonas del diamante para pactar el inicio del encuentro a las 8:15 pm.
JMH