"Tuvimos unas caídas y patinones", pilotos narran su experiencia en el Coahuila 1000

César afirmó que hubo percances, pero nada que lamentar, su experiencia en Coahuila fue enriquecedora e incita a volver

"Klunder Team" directamente desde La Ciudad de México, se hizo presente en el Rally. (Especial)
Este equipo capitalino vino a competir al desierto coahuilense. (Especial)
Luis Salcedo Cassio
Torreón, Coahuila. /

El llamado "Klunder Team" directamente desde La Ciudad de México, se hizo presente en el Rally Coahuila 1000. Con una discreta participación, pero con un gran entusiasmo, este equipo capitalino vino a competir al desierto coahuilense.

Asistidos en todo momento por el carismático "Pitza" y Yamilet Saldoval, los pilotos César Concha y Marco Vaurambon, hablaron de su experiencia en este rally que reunió a cientos de competidores de todas partes de la República Mexicana.

"La ruta estuvo fantástica, tiene de todo, mucha arena, piedra, y lo que más nos gustó es la seguridad en todo el evento, en toda la ruta, te atienden excelente en los pases para la moto, la carga de gasolina es rápido, eso ayuda mucho. Te dan descanso, agua, te dan todo y la ruta estuvo estupenda", dijo César Concha.


Añadió que hubo percances, pero nada que lamentar, su experiencia en Coahuila fue enriquecedora e incita a volver.

"Tuvimos unas caídas, patinones, a lo mejor no alcanzamos a subirnos al podio de ganadores, hay mucho piloto muy bueno, pero como experiencia, nos llevamos una muy grata impresión, seguramente en 2022 si todo pinta bien, por aquí nos vemos otra vez", concluyó.

Por su parte, Marco Vuarombon, quien lucía los estragos de los incandescentes rayos solares del desierto coahuilense en su piel, que el sábado por la tarde lucía colorada.

"Varios amigos nos habían contado que se ponía bien aquí en Coahuila, correr dos días, bajo estas condiciones de intenso calor, es extremo, es demandante pero muy gratificante", dijo.


La parte mental es muy importante en una competencia tan demandante, son mil kilómetros por el desierto de Coahuila.

"La resistencia, el cansancio, ir midiéndose porque son dos días de competencia, el trabajo mental también cuenta en esta carrera. Sabíamos que teníamos que hacer los mil kilómetros, no es lo mismo hacer un rally de 300 que puedes ir a mucha velocidad, en este corrimos bien, nos divertimos responsablemente, sí hacer un buen tiempo pero no está en nosotros venir y lastimarnos, somos amateurs. Competimos, pero sin pasar nuestros límites", precisó Marco, quien dijo, volverán a participar el siguiente año.

"Está muy variado, arena, montaña, los paisajes del desierto, la ruta de Parras a Torreón, había partes que eran de navegación de verdad, muy padre".

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